Después de dos semanas sin carreras, la fórmula 1 regresa este fin de semana más emocionante que nunca, con Fernando Alonso al frente del mundial, pero con una exigua renta de dos puntos sobre Michael Schumacher.

La emoción de estos días se ve trufada de declaraciones de uno y otro lado.

Alonso ha realizado unas declaraciones a la revista alemana Auto Motor Sport, en las que reconoce que no le apetecía seguir en Renault.

Alonso, explica que su "amor" por la escudería Renault se acabó y justificó su paso a McLaren-Mercedes por la necesidad de un "cambio de aires".

También reconoce su desapego por Ferrari: "Nunca contemplé marchar a Ferrari, la escudería italiana no me hizo ninguna oferta".

Alonso anunció a finales de 2005 que en 2007 correrá con las "flechas de plata" de McLaren-Mercedes.

"Uno se debe separar en el momento más alto", dijo. Alonso cree que las posibilidades de éxitos deportivos de Renault más allá de la actual temporada no serán muy altas. "No creo que Renault gaste en el futuro el dinero que es necesario para ganar".

Lo que queda por delante

Cualquiera de los dos puede ser campeón porque faltan tres pruebas por disputarse, o lo que es lo mismo, 30 puntos en juego.

El primer asalto, este domingo, en Shanghai:

- GP de China. Alonso ganó el año pasado en Shan-ghai, un moderno trazado que cuenta con una larga recta y dos giros antes de encarar la meta. La carga aerodinámica es alta y los frenos sufren.

- GP de Japón. Suzuka es uno de los circuitos más técnicos del mundial. A priori, es bueno para Alonso, aunque el asturiano nunca ha ganado allí (8 de octubre).

- GP de Brasil. Alonso se proclamó campeón en 2005 tras acabar tercero en Interlagos. La lluvia es habitual en este trazado de sentido inverso a las agujas del reloj (22 de octubre).