La primera polémica de la temporada está servida. Estaba acabando el GP de Jerez en MotoGP, con Dani Pedrosa liderando la carrera y directo hacia su primera victoria del Mundial.

Por detrás de él rodaban Jorge Lorenzo y Marc Márquez. El debutante en la categoría estaba apretando al campeón del mundo y ya no le quedaba sitio para adelantarlo. Se llegó a la última curva del circuito y Lorenzo dejó un pequeño hueco por el que Márquez, muy agresivo, se metió, pero tan abierto que se tocó con Lorenzo, que se salió de la trazada y que perdió cualquier opción de queda segundo.

Una vez acabada la carrera, Lorenzo, que en pista había negado con la cabeza y la mano, rehusó saludar a Márquez cuando éste se acercó a saludarle. La escena se volvió a repetir en el podio. El campeón del mundo no quiso estrechar la mano de Márquez.

En declaraciones a Telecinco, Márquez, que ahora es líder del Mundial, explicó que lo ocurrido en la última curva "ha sido un lance de carrera". Para el de Honda lo importante "es que no se ha caído ninguno" y que fue "un final bonito para el aficionado".

Por su parte, Jorge Lorenzo no quiso hacer declaraciones al acabar la carrera: "Prefiero no comentar nada en caliente, porque sería negativo lo que dijera".

Más tarde, en declaraciones a la prensa, se mostró muy disgustado con la acción de Marc Márquez en la última curva del circuito, precisamente la misma que desde este fin de semana lleva su nombre y aseguró que "como no gano nada con lo que diga, no voy a hablar de ello".

"No voy a hablar del tema, ni de lo que pueda haber dicho en televisión Wilco —por su director deportivo Wilco Zeelenberg—, él tiene su opinión, aunque me asegura que se ha malinterpretado, principalmente antes de decir lo del tenis —referido a que las carreras de motos no son partidos de tenis—, con lo cual como no lo he oído no puedo opinar, tendría que ver la grabación", dijo.

"No gano nada hablando del incidente y como no lo gano no voy a hablar", recalcó Jorge Lorenzo, quien se quejó de que tras su victoria de Catar apenas se le hicieron preguntas y "ahora tantas", además de aclarar sobre su comportamiento a la llegada, cuando le niega la mano a Márquez "he decidido no darle la mano, simplemente".

En un determinado momento a Lorenzo se le recordó el incidente que en ese mismo punto protagonizó él con Joan Olivé y sobre el mismo dijo que "tenía diez años, fue peor, mucho peor, pero tenía diez años", repitió.

Por su parte, Marc Márquez intentó quitar hierro al hecho de que por tres veces intentó dar la mano sin éxito a Jorge Lorenzo tras la carrera y explicó que no se habían llegado a decir nada.

"Le he intentado pedir disculpas en tres ocasiones, pero también se ha visto que tiene mucha experiencia y que en caliente no ganaría nada con decir cualquier cosa, así que máximo respeto para él y pedirle aquí nuevamente disculpas y que lo entiendo perfectamente que esté así", incidió.

En cuanto al percance en sí, Marc Márquez comentó: "la última curva ha venido un poco de la carrera en general, ya que ha sido una carrera al ciento por ciento, en la que he estado a punto de caerme varias veces y en la que en toda la carrera he intentado coger a Jorge, porque a mitad de carrera le intenté pasar pero no podía y no me encontraba muy bien con el tren delantero".

"Se me cerraba mucho la dirección —continuó el piloto de Repsol— pero he sabido entender el estilo de pilotaje que tenía que adoptar con la moto y la última vuelta ha sido lo que se ha visto, el primer intento ha sido fallido porque me he ido largo y he visto que era demasiado arriesgado, por lo que he dejado frenos y he intentado estar lo más cerca de él —por Jorge Lorenzo—".

"En la última curva, como había visto en vídeos, simplemente me pensaba conformar con la tercera posición, porque pensaba que Jorge se cerraría un poco más, pero cuando he visto que se ha abierto me he ido hacia adentro y.., lo más importante es que los dos hemos acabado", recalcó