"No pude ir hasta el final. Renuncié a activar mi cinturón. No por cobardía, no por miedo. Porque no quería, es todo", ha dicho el único superviviente del comando que provocó 131 muertos y 414 heridos.
Admite que mintió a sus cómplices cuando les aseguró que el mecanismo de los explosivos no funcionó.
"No deseo responder a ninguna pregunta (...). Se me acusa, aquí estoy. aMi silencio no me hace culpable ni criminal, es mi defensa", dijo el presunto yihadista
Es el único superviviente de los comandos yihadistas que atacaron París el 13 de noviembre de 2015.
Abdeslam está acusado en Bélgica de "intento de asesinato de varios policías en el contexto de una acción terrorista", por un tiroteo en Bruselas en 2016.
En una serie de correspondencias con una mujer, el presunto terrorista sostiene no tener vergüenza de lo que es y reitera su fe religiosa.
El joven quiere asegurarse de que su interlocutora no le quiere como "si fuera una estrella o un ídolo" porque ese papel le corresponde a "Alá, señor del universo".
Abdselam ha mantenido un silencio total ante el juez instructor desde su llegada a Francia en abril de 2016.
La información procede de un estudio del Centro de Análisis del Terrorismo y ha sido publicada en 'Le Monde' con motivo del primer aniversario de los atentados de París.
Los más de diez yihadistas que cometiern los atentados de París y Bruselas emplearon Hungría como plataforma para sus viajes.
Abdelhamid Abaaoud, coordinador en el terreno del 13-N, siguió la ruta de los Balcanes junto a El Khazzani, que intentó atacar en un tren entre Amsterdam y París.
Salah Abdeslam, único yihadista superviviente, hizo tres viajes entre Bélgica y Hungría y otro al sur de Alemania para trasladar a los implicados en los ataques.
De los miembros identificados hasta ahora de toda la trama, 13 están muertos y cuatro autores directos fueron detenidos, entre otros.
"Lleva barba y se ha convertido en un auténtico fundamentalista cuando antes no era más que un chaval de la calle", ha descrito Sven Mary a un medio neerlandés.
El abogado belga renunció el pasado mes de octubre a seguir defendiendo a Abdeslam, único yihadista vivo de la célula de los atentados del 13-N.
Mary cree que Abdeslam, sospechoso clave de los ataques, no colaborará debido a las condiciones que se encuentra en la cárcel.
Tras ser extraditado a Francia, Abdeslam se encuentra en la prisión de Fleury Mérogism en condiciones de aislamiento y videovigilado las 24 horas.