La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, aseguró hoy que el robo de armas en Francia atribuido a ETA es un acto "estéril e inútil si lo que se pretende es utilizarlo como medio de presión".
En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, Fernández de la Vega manifestó que el Gobierno "sigue cerciorándose de la auténtica voluntad de ETA" de un cese definitivo en todo tipo de violencia y garantizó que el Ejecutivo será "exigente" a la hora de comprobar esa voluntad.
El robo es "un delito muy grave que vamos a perseguir hasta el final, destacó la vicepresidenta, quien se mostró convencida de que sus autores serán enjuiciados y que sobre ellos "recaerá todo el peso de la ley".
Estas declaraciones se producen tras saber que los testimonios no permiten identificar a los presuntos etarras que robaron 350 armas en Francia.
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