La juez de instrucción número 33 de Barcelona abrió el jueves nuevas diligencias por un presunto delito de atentado a los padres de un alumno que agredieron y amenazaron a dos profesores y un conserje del colegio público Eduard Marquina.
La magistrada ha accedido a la petición del fiscal y de la acusación particular que el caso se tramite como un delito y no como una falta lo que podría conllevar una sentencia con pena de uno a tres años de prisión para estos padres.
La semana pasada el Fiscal Jefe de Catalunya,
Juicio suspendido
La juez suspendió el pasado martes el juicio a estos padres, acusados inicialmente de faltas por amenazas y agresión a educadores de este centro para estudiar si abría diligencias por un presunto delito.
Según fuentes judiciales, los padres están acusados de agredir y amenazar de muerte a la directora, al jefe de estudios y al conserje del centro después de discutirse con ellos.
Por lo que parece, los padres exigían que a su hijo, que estudia educación infantil, le permitieran entrar una hora antes del horario establecido.
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