La economía francesa entró en recesión en el primer trimestre del año tras caer un 0,2%, según confirma la segunda estimación publicada este miércoles por la oficina estadística francesa Insee.
Con el descenso del 0,2% experimentado entre enero y marzo, Francia entra oficialmente en recesión al haber acumulado dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo (en el último trimestre de 2012 su PIB también cayó un 0,2%).
En concreto, el gasto en consumo de los hogares entró en negativo en el primer trimestre (-0,1%) después de haber aumentado una décima en los tres últimos meses de 2012.
Asimismo, la inversión total siguió disminuyendo entre enero y marzo y amplió en dos décimas su caída trimestral, desde el -0,8% al -1%. En concreto, la demanda interna contribuyó negativamente al PIB (-0,2%), al igual que la demanda externa (-0,2%), que tuvo un impacto positivo de una décima en el último trimestre de 2012.
Por otro lado, las exportaciones aumentaron ligeramente (+0,2% frente a la caída de un 1% registrada en el cuarto trimestre de 2012), mientras que las exportaciones volvieron a caer (-0,4%), aunque en menor medida que en los tres meses anteriores (-0,7%).
Por último, la oficina estadística informa de que los cambios en los inventarios de las empresas contribuyeron positivamente a la evolución del PIB del primer trimestre, ya que dejaron atrás la caída del 0,2% de finales de 2012 y subieron dos décimas.
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