Albiol asegura que los panfletos racistas denunciaban un problema real de los vecinos

  • Afirma que son el 0,4% de la población pero cometen el 25% de los delitos.
  • Acompañado por Sánchez-Camacho, repartió panfletos en los que se relacionaba a los gitanos rumanos con la inseguridad.
  • La Fiscalía y SOS Racisme piden que se le condene a un año de prisión por un delito de provocación al odio, la discriminación o la violencia.
  • Defensores y detractores se concentran ante la Ciudad de la Justicia.
El alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, en el banquillo de los acusados por la distribución de panfletos que relacionaban los gitanos rumanos con la inseguridad.
El alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, en el banquillo de los acusados por la distribución de panfletos que relacionaban los gitanos rumanos con la inseguridad.
GUILLEM SÀNCHEZ / ACN
El alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, en el banquillo de los acusados por la distribución de panfletos que relacionaban los gitanos rumanos con la inseguridad.

El Juzgado Penal 18 de Barcelona juzga este miércoles al alcalde de Badalona, Xavier García Albiol (PP), por repartir en 2010 junto a la líder del partido en Catalunya, Alícia Sánchez-Camacho, panfletos electorales que vinculaban a los gitanos rumanos con los problemas de seguridad y delincuencia de la ciudad. El dirigente popular asegura que sólo denunció una realidad demostrable con "datos objetivos".

Unas 200 personas, en su mayoría jubilados, han arropado al alcalde badalonés a su llegada a la Ciudad de la Justicia, portado una gran pancarta con el lema 'Queremos vivir en paz. Albiol no te rindas' y han sostenido cuartillas en alto con la leyenda 'Alcalde estamos contigo', mientras que al otro lado del pasillo improvisado los detractores, convocados por Àgora Ciutadana Badalona y SOS Racisme, han reivindicado una 'Tolerancia cero con el racismo' y han tachado a Albiol de "racista, autoritario, clientelista, clasista, represor y españolista".

l dirigente popular ha llegado acompañado por otros miembros del partido, como el líder del PP en Barcelona, Alberto Fernández Díaz, y el secretario general del PP catalán, Jordi Cornet. La presidenta del PP de Cataluña también tiene previsto acudir a la a lo largo de esta mañana, según ha dicho el acusado, quien ha reconocido estar viviendo "momentos complicados" aunque tiene la conciencia muy tranquila porque considera que su obligación es ayudar a los vecinos.

"Me parece una injusticia tener que estar aquí", ha declarado a los periodistas en unas breves declaraciones sin aceptar preguntas antes de entrar en la sala, y ha añadido que lo siente así no sólo por él sino también por los vecinos de algunos barrios de Badalona que en su opinión lo están pasando mal con problemas de convivencia, incivismo e inseguridad.

Albiol se defiende

Durante el tenso interrogatorio al que le ha sometido el fiscal de Barcelona para los delitos de odio y discriminación, Miguel Ángel Aguilar, Albiol ha asegurado que los problemas de seguridad e incivismo con los gitanos rumanos de la ciudad "son datos objetivos". En ese sentido, ha dicho que los gitanos rumanos son el 0,4% de la población pero son responsables del 25% de los delitos, aunque ha reconocido que en ese momento no era alcalde y no tenía datos oficiales. "Hay un problema de integración con esa comunidad. No lo digo yo, lo dicen los expertos", ha dicho el alcalde.

El ahora alcalde ha reiterado que con los folletos "no hay ninguna intención de menospreciar a nadie", y ha justificado que el díptico incluyera una foto con el mensaje 'no queremos rumanos' —entre otras imágenes— porque hacen referencia a problemáticas concretas y las hicieron llegar los vecinos. No obstante, ha reconocido haber utilizado expresiones "inadecuadas" para referirse a los gitanos rumanosde la ciudad.

En una ocasión, tras el reparto de los folletos, dijo a los medios: "El colectivo rumano se ha instalado en nuestra ciudad a delinquir y a robar". "Puede no haber sido adecuada, pero eso no quita el valor total", ha indicado durante el juicio. En cambio no recuerda haber dicho cosas como que "los rumanos son una plaga y son una lacra para la ciudad". "Yo ese vocabulario no lo utilizado y no lo reconozco", ha explicado.

El juicio ha registrado momentos de tensión entre el juez y el fiscal y la acusación popular: "Esto no es un debate, es un juicio: haga usted preguntas", ha dicho el magistrado al representante del Ministerio Público. Asimismo, el magistrado ha tolerado que el acusado defendiera la expulsión de los gitanos rumanos que cometan delitos: "No pasa nada porque esta persona diga que se deberían expulsar", ha dicho.

El abogado defensor, Cristóbal Martell, ha rechazado hacerle preguntas, y el fiscal —en sus conclusiones basándose en la legislación internacional— ha insistido en que "ser político no da patente de corso". "En ningún modo estamos juzgando ideas políticas ni un partido. Sólo la difusión de un folleto unido a una serie de manifestaciones que amplificaron y dieron sentido al folleto", ha recordado el magistrado al fiscal.

Acusaciones "sólidas y consistentes"

Un auto de la titular del Juzgado de Instrucción 2 de Badalona, que investigó el caso, considera "sólidas y consistentes las acusaciones formuladas" por la Fiscalía y la acusación particular —SOS Racisme Catalunya— que atribuyen a Albiol un delito de provocación al odio, a la discriminación o a la violencia,  por el que solicitan para el ahora alcalde un año de cárcel.

Los 15.000 dípticos que los populares repartieron por los barrios de Llefià, Sant Roc y La Salut de Badalona el 24 de abril de 2010 —año anterior a las elecciones municipales— contenían fotografías de gitanos rumanos acompañados de lemas como 'inseguridad', 'delincuencia' y 'vandalismo', y la imagen de una pintada con el mensaje 'no queremos rumanos'.

En las semanas posteriores al reparto de los folletos, Albiol continuó promocionando el mismo discurso en diferentes medios de comunicación y actos, como por ejemplo en una butifarrada popular en la plaza de Trafalgar el 19 de septiembre.

En ese acto al que asistieron más de 800 personas, la mayoría ancianos, Albiol dijo: "Aquí no tenemos campamentos de gitanos como en Francia, aquí la situación es aún peor, están repartidos por los barrios de la ciudad haciendo la vida imposible a los vecinos y, encima, cuando nos quejamos nos atacan y nos tachan de racistas", recoge el escrito que SOS Racisme remitió al juez.

Caso reabierto

A mediados de septiembre de 2012, la Audiencia de Barcelona obligó a reabrir la causa al Juzgado de Instrucción 2 de Badalona al concluir que estas expresiones representan objetivamente un ataque a la dignidad personal y al honor de todos lo miembros del colectivo de gitanos rumanos y pueden contener un "mensaje claramente incitador a la discriminación y al odio".

Esta decisión echó por tierra la decisión del juzgado de instrucción que lo había archivado al considerar únicamente como excesos verbales algunas de las declaraciones del alcalde, apelando a la libertad y al derecho del político de "expresar políticas de inmigración alternativas a la vigente".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento