Reporteros sin Fronteras denuciará ante la ONU el caso del canal RCTV

  • A la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, la semana que viene.
  • Cree que la no renovación de la licencia perjudica al pluralismo editorial.
  • Chavez justificó su decisión por la supuesta implicación de RCTV en el golpe contra él.
Concentración convocada por las Nuevas Generaciones del PP ante la embajada de Venezuela en Madrid, este martes.
Concentración convocada por las Nuevas Generaciones del PP ante la embajada de Venezuela en Madrid, este martes.
EFE
Concentración convocada por las Nuevas Generaciones del PP ante la embajada de Venezuela en Madrid, este martes.

La organización Reporteros Sin Fronteras (RSF) anunció este martes que planea llevar el caso de la no renovación de la concesión del canal venezolano RCTV, el más crítico al gobierno de Hugo Chávez, a la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.

La organización no gubernamental basada en París visitó Venezuela a fines de mayo para evaluar las consecuencias de la medida para la libertad de información y concluyó de que significa la "consolidación de una hegemonía mediática" en el país.

El cierre del canal RCTV supone un grave peligro para el pluralismo editorial

"El cierre del canal (...) RCTV inaugura una auténtica hegemonía del poder sobre el espacio audiovisual y un grave peligro para el pluralismo editorial", dijo el informe de 36 páginas.

"Reporteros Sin Fronteras va a presentar el caso de RCTV ante el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas, cuya próxima sesión tendrá lugar en Ginebra del 11 al 18 de junio", agregó.

Protestas de los venezolanos y de la comunidad internacional

RCTV salió del aire en 27 de mayo después de 53 años de transmisiones, para ser sustituido por un nuevo canal oficialista llamado Televisión Venezolana Social (Tves), lo que generó protestas callejeras en el país y críticas de la comunidad internacional.

Chávez justificó la no renovación de la licencia argumentando que RCTV estuvo involucrada en el fugaz golpe que lo sacó del poder por algunas horas en el 2002 y que habría censurado las protestas que rodearon su regreso al poder.

Durante la visita, la organización dijo que se entrevistó con periodistas, representates de ONG y analistas políticos, pero no logró marcar reuniones con funcionarios del gobierno y de medios de comunicación públicos, ya que las peticiones habrían quedado "sin respuesta".

Además de la ONU, la organización piensa presentar el caso al Consejo de Europa y a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA, señaló el informe.

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