Parece que algo se mueve en el escenario político español, al menos de boquilla. Después de que este miércoles el candidato del PSOE, Pedro Sánchez, no lograse el apoyo del Congreso en la primera votación para ser investido presidente del Gobierno, los líderes del PP y Podemos, Mariano Rajoy y Pablo Iglesias, respectivamente, están dispuestos a mover ficha. Eso sí, será después de la segunda votación, prevista para este viernes, en la que todo apunta a que Sánchez tampoco conseguirá la mayoría necesaria.

Activado así el plazo de dos meses hacia la celebración de nuevas elecciones, Rajoy llamará al secretario general socialista a partir del sábado para tratar de conseguir un acuerdo que dé a España un Gobierno estable y de futuro. Así lo ha anunciado este jueves la secretaria general de los populares, María Dolores de Cospedal, en una entrevista en Tele 5. En ella ha asegurado que el presidente en funciones reiterará al líder socialista su propuesta de gran coalición con Ciudadanos al considerar que es lo mejor para el país.

"El PP va estar "luchando hasta el último día" para lograr un Gobierno estable, ha dicho Cospedal, que ha criticado a Sánchez por presentarse a la investidura "con un programa que no había sido consensuado con las suficientes fuerzas políticas".

Por su parte, el secretario de Organización de Podemos, Sergio Pascual, ha afirmado este jueves que es posible el diálogo entre su partido y el PSOE es posible, a pesar de la "crudeza" con la que se expresó Iglesias en el debate de investidura. Pascual ha apostado por que el diálogo empiece cuanto antes", "si puede ser el sábado", después de la segunda votación de investidura de Sánchez.

"Nos estamos jugando mucho los españoles y los candidatos se expresan con crudeza, pero evidentemente lo que importa es buscar soluciones y tenemos dos meses para ello", ha dicho, en declaraciones a RNE. Eso sí, Pascual ha insistido en que para dar soluciones a los españoles hay que sentarse en la mesa "a cuatro", PSOE, Podemos, IU y Compromís, que suman 161 escaños, más cerca "de los 169 que tuvo Zapatero que de los 130 que ayer recibieron el no", en alusión al pacto PSOE-Ciudadanos.

Así, ha confiado en que Sánchez entienda cuanto antes que la vía que intentó está "agotada", y ha apuntado que él mismo parecía estar pidiendo perdón al hablar de "mestizaje ideológico". También ha recordado que otros partidos como PNV y ERC han dejado claro que podrían apoyar más fácilmente a un gobierno de izquierdas. No obstante, ha dejado claro que no es partidario de que ERC se sume a esa mesa de cuatro interlocutores.

Pascual ha dicho que le sorprendió la insistencia de Sánchez en pactar con Ciudadanos, más lejos de su programa de lo que estaría con un acuerdo entre los cuatro grupos de izquierda. "Pero como los números son tercos, parece que el PSOE ha tenido que pasar este baño de realidad para volver a sentarnos", ha añadido.