El jefe de las fuerzas de EE UU en Irak, el general David Petraeus, abogó este lunes ante el Congreso de su país por reducir a partir de octubre en unos 30.000 soldados la presencia militar estadounidense en Irak. Esto es, los mismos que fueron enviados a principios de año por orden del presidente, George W. Bush, para combatir a la insurgencia.
La intervención de Petraeus, tal y como exige la mayoría demócrata en el Congreso, es fundamental para cualquier decisión que quiera tomar Bush sobre una nueva estrategia en Irak.
Consciente de ello, el general ha dejado claro que
Los objetivos del plan por el que se enviaron más soldados a Irak "están cumpliéndose", dijo Petraeus, que ha estado acompañado en su intervención por el embajador de EEUU en Irak, Ryan Crocker.
Logros amplios pero desiguales
En el relato de los logros de las fuerzas estadounidenses en los últimos meses, el general afirmó que éstos son "desiguales" pero amplios, porque han permitido reducir los ataques de los insurgentes y la cifra de bajas civiles.
Añadió que el aumento de la presencia militar de EE UU en Bagdad y en la provincia de Al Anbar, en el oeste de ese país, ha reducido la violencia sectaria y permitido "la aparición de un rechazo de las tribus a Al Qaeda que se ha extendido a otras provincias".
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios