Corre, Sarah Connor: hoy, el Terminator va a por ti

Cuando los titulares te sobrepasen, cuando pienses que nos espera el Apocalipsis, recuerda que la humanidad se las ha visto peores y ha sobrevivido, tanto en la realidad como en la ficción. Sin ir más lejos, el 12 de mayo celebramos una de esas ocasiones. Tal día como hoy, en 1984, un cíborg asesino (es decir, un Terminator) clavadito a Arnold Schwarzenegger y venido del futuro se paseó por Los Ángeles con un único objetivo: matar a una tal Sarah Connor.

Ahora todos sabemos de qué iba aquello: Sarah (con el rostro de una Linda Hamilton ochentera) iba a ser la madre de John Connor, futuro líder de la resistencia humana contra las perversas máquinas. Pero en aquel momento, cuando el nombre de Skynet nos sonaba aún menos que el de James Cameron, imagínate el jeto que se nos puso al ver esto moviéndose por Griffith Park…

...Y más aún cuando descubrimos los modales que gastaba el angelito.

Para la pobre Sarah, que curraba de camarera, todo se volvió desde entonces un sinvivir.

Especialmente al enterarse de que el bicho, con precisión austrohúngara, estaba cargándose a todas las Sarah Connor de la guía telefónica.

Pero, tras los primeros sudores…

…El destino intervino en forma de Kyle Reese (Michael Biehn). ¡Ah, el destino!

Y aunque el periplo resultante fue difícil y lleno de sacrificios…

…Todos sabemos cuáles fueron sus resultados a medio plazo.

Así pues, todos podemos aprender de Sarah y su mal día: si alguien dice aquello de "¡Viene una tormenta!", cálate la cinta del pelo y responde…