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Crisis en salseos infinitos: las polémicas de James Gunn tras su llegada a DC

Ray Fisher, James Gunn y Gal Gadot.

Inquieta reposa la cabeza que lleva una corona, y si la corona es la de DC, ni te contamos. James Gunn puede dar fe de ello, porque tras haber ocupado su puesto como director creativo del estudio (junto a Peter Safran) ya ha recibido su correspondiente ración de polémicas en redes.

Aunque la marcha de Henry Cavill como Superman no le ha obligado a esquivar demasiados obuses, Gunn sí ha tenido que enfrentarse a Ray Fisher (Liga de la Justicia) y a los fans de Gal Gadot. 

El intérprete de Cyborg, ya con una buena mochila de enfrentamientos por el estudio, ha acusado al cineasta de "falsa bondad" por borrar unos tuits en los que manifestaba su solidaridad después de que Fisher señalara a Joss Whedon por su comportamiento tiránico en el plató.

Según el actor, Gunn "apoya primero a Joss Whedon, se disculpa falsamente por ello y después lo borra inmediatamente antes de ocupar su nuevo puesto en DC". "Negarte a pedir disculpas por tu comportamiento tóxico parece un requisito para tener trabajo en Warner-DC", remacha Fisher.  

La respuesta de Gunn a estas invectivas ha sido tajante: "Todos mis tuits se borran automáticamente pasados unos meses, Ray. Que esos tuits fuesen para ti no tienen nada que ver". 

Recordemos que unos tuits de mal gusto, desenterrados con bastante mala fe, provocaron un enfrentamiento entre Gunn y Marvel. De esta manera, tiene sentido que el cineasta haga lo posible por borrar sus huellas digitales. Algo que no le salva de sufrir la ira de las amazonas. 

Conversación entre James Gunn y un fan de Gal Gadot en Instagram.
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Porque el hecho de haber cancelado la producción de Wonder Woman 3 también le ha costado al director un disgusto, en forma de mensajes que le acusan de "darle la patada" a Gal Gadot. A lo cual él replica que no le ha dado la patada a nadie, y menos a la actriz israelí. 

Así las cosas, James Gunn no ha lanzado un comunicado oficial, pero sí un equivalente en forma de hilo de Twitter. Según afirma, tanto Safran como él mismo esperaban enfrentarse a un sector del fandom "tumultuoso y maleducado, como mínimo". 

"Nuestras elecciones para el Universo DC se basan en aquello que creemos que es mejor para la historia y para los personajes de DC, que ya llevan por aquí casi 85 años", añade Gunn. "Quizás son buenas decisiones, quizás no, pero las tomamos con el corazón sincero y con integridad y siempre pensando en la historia". 

"A nadie le gusta que le acosen o que le insulten, pero, para ser sinceros, nos hemos visto en mucho peores", prosigue para después afirmar que "los ataques y las faltas de respeto" nunca condicionarán sus decisiones en DC. "Cuando aceptamos el trabajo, sabíamos que iba a haber un período de turbulencias", explica acto seguido, señalando la necesidad de "decisiones difíciles y poco explicables" para poner el estudio en orden. 

"Esto significa bien poco para nosotros comparado con nuestros trabajos como artistas y guardianes, responsables de crear un futuro amplio y maravilloso para DC", remacha Gunn. Esperemos que sus buenas intenciones sean sinceras... y que, de serlo, no acaben hechas picadillo por la afición de las redes sociales al salseo.

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