Edgar Wright rompe seis años de silencio con Marvel
Edgar Wright fue uno de los más notorios cadáveres en la cuneta de Marvel cuando abandonó el proyecto de Ant-Man en 2014 alegando las siempre recurrentes "diferencias creativas". "La respuesta más diplomática sería que yo quería hacer una película de Marvel, pero ellos no querían hacer una película de Edgar Wright", explicaba el director británico tiempo después.
Ahora, tras seis años de silencio, el cineasta finalmente ha hablado con Kevin Feige, cabeza de Marvel Studios. Wright ha colaborado recientemente con la revista Empire para recopilar grandes momentos de la experiencia cinematográfica y así promover la asistencia a salas ahora que muchos cines están cerrando a causa de la pandemia.
Preparando este número, el director ha confesado (vía Comic Book Movie) que se dio cuenta de lo mucho que el MCU había influido en los cinéfilos, por lo que decidió hablar con el mandamás de Marvel Studios tras todos estos años sin saber nada el uno del otro.
"Me pareció que sería falso por mi parte hacer este artículo sin mencionar la letra 'M' ni una sola vez. Por lo que hice lo que no había hecho en seis años, envié un email a Kevin", ha explicado el británico: "Fue muy agradable, y Kevin estaba muy conmovido de que contactara directamente con él y le dijera 'hola".
"También fue divertido, después de seis años sin contacto, enviarle un email diciéndole: 'Kevin, necesito que escribas algo para mí, y lo necesito para mañana", ha bromeado: "Fue agradable, básicamente reconectamos por este artículo y fue muy dulce. Estoy contento de haberlo hecho".
Cabe recordar que Ant-Man era un proyecto muy personal para Wright, en el que había estado trabajando durante varios años. El director y el guionista Joe Cornish (Attack the Block) abandonaron la película tras nada menos que seis años de preparación. Peyton Reed lo sustituiría en la silla de dirección y, conservando su reparto y gran cantidad de las ideas del guion de Wright y Cornish, acabaría estrenando la producción protagonizada por Paul Rudd con gran éxito.