Antony Starr ('The Boys') tiene algo que decir a los fans que le confunden con Homelander: "Es un psicópata narcisista"
Desde que Homelander (Patriota) fuera presentado en 2019, son muchos los que se han reído y disfrutado con algunas de sus tramas más delirantes en The Boys. Esto ha hecho que, al igual que pasara en su momento con personajes como Joffrey Baratheon (Jack Gleeson) en Juego de tronos o Benjamin Linus (Sterling Beaumon) en Perdidos, muchos crean que el actor Antony Starr es igual que él en la vida real.
Lo cierto es que Starr se ofende bastante cuando le confunden con su personaje en The Boys. Un antihéroe sádico, sonriente, con un poder ilimitado y un extraño fetiche por la leche materna, que se esconde tras una bandera estadounidense. Algo que provoca el escalofrío y las chanzas de muchos, y hace que incluso los nuevos miembros del equipo le traten como tal, apartándose de su camino en el set cuando va caracterizado.
"La gente se sorprende y dice: 'Oh, Dios mío, en realidad no eres como él. Y yo digo: 'Sí, es un psicópata narcisista. Así que sí, gracias. Gracias por eso", declara el actor para Rolling Stone. "En realidad, no tengo superpoderes. Tengo un trasero muy sensible", añade de forma cómica, aludiendo a la lesión dolorosa que sufrió en su coxis durante las grabaciones.
Esto explica que, cada vez que termina el rodaje de una nueva tanda de episodios, decida raparse para recuperar su castaño natural y abandonar el rubio de Homelander, mientras que se oculta tras unas gafas de sol que escondan sus característicos ojos azules. Una forma de dejar de llamar la atención y parecerse menos, al menos físicamente, al personaje.
No ayuda que el actor neozelandés tuviera un incidente en su visita a España en 2022. En ese momento, Starr golpeó con el puño en varias ocasiones a un joven de 21 años en un pub, creando una imagen negativa de él. Por ello, fue condenado a un año de cárcel y una indemnización a la víctima, después de declararse culpable.
En la cuarta temporada de The Boys, actualmente en emisión en Prime Video, la analogía entre Homelander y Trump se hace cada vez más patente. En los nuevos episodios, el villano alcanza el poder un gobierno fascista en EE UU, gracias a la inestimable ayuda de Firecracker (Valorie Curry), quien trafica con conspiraciones y da golpes de Biblia.
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