Uno de los grandes problemas a los que se enfrenta el fútbol de categorías inferiores radica en las asistencias médicas en caso de necesidad. El último ejemplo llega desde el partido entre la Unión Deportiva Las Palmas C y el Atlético Tacoronte, en Tenerife.

En un momento del encuentro, Saúl Coco, jugador del filial amarillo, se dio un fuerte golpe contra el muro del fondo del campo. Sus compañeros y rivales se alarmaron mucho al ver la violencia del choque, por lo que pidieron rápidamente las asistencias. El árbitro paró el partido inmediatamente hasta que una ambulancia llegara a recogerle. Casi cuarenta minutos después, esta le trasladó a un hospital de Santa Cruz, donde le detectaron una doble fractura en ambas muñecas y una herida en la rodilla.

El defensa, que es internacional con Guinea Ecuatorial, se tomó con filosofía lo sucedido, y desde el propio hospital mostró con una sonrisa que había sido sólo un susto. Se da la circunstancia de que, además, este domingo cuando ocurrió el incidente, cumplía años.