El Barcelona recupera su mejor versión para golear al Villarreal y mantener la persecución al Real Madrid
- Actuación estelar de los culés, con goles de Pau Torres en propia, Griezmann, Luis Suárez y Ansu Fati.
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El Villarreal se llevó un duro correctivo de un Barcelona que no tenía margen de fallo. La victoria del Real Madrid ante el Athletic obligaba a que los blaugrana recuperasen la forma y el ánimo, tras unos días convulsos, y lo hicieron a lo grande: el 1-4 final fue un resultado perfecto a lo que se vio en el campo.
El conjunto castellonense se vio por detrás en el marcador muy pronto. A los 3 minutos, Sergi Roberto abrió para Jordi Alba, este centró y Griezmann, titular tras la polémica del último encuentro, tocó de tacón lo justo para que Pau Torres se marcase en propia puerta.
La respuesta del Submarino fue no hundirse. Un balón largo llegó a Paco Alcácer, al borde del fuera de juego, que cedió a Cazorla y este, con un buen centro, le puso el balón franco para que Gerard Moreno rematase a Ter Stegen y marcase su tercer gol en dos partidos.
El frenético partido no dejó un instante de descanso, y en el minuto 20 volvió a subir un tanto al marcador. Luis Suárez, al que Asenjo había parado un gol, recibió un buen balón de Messi (al que los defensas dejaron marcharse fácil) y remató según venía justo por encima del portero villarrealense.
El 1-2 calmó algo el partido hasta la pausa de hidratación, cuando Alcácer advirtió a Calleja que tenía molestias. Carlos Bacca entró a su lugar al momento, y en el primer balón que tocó, chutó muy fuerte ante Ter Stegen, que despejó como pudo. Algo similar hizo Arturo Vidal a continuación, pero en su caso sí tenía opción de ceder a Luis Suárez pero eligió disparar 'al muñeco'.
Al borde del descanso, un Griezmann que estaba siendo el mejor del encuentro se redimió de toda polémica con un golazo, que vino precedido de un pase de tacón de Messi. Picada, justo por encima de Asenjo, el francés marcó un gol que levantó a todo el banquillo culé, incluido un Setién que está en el ojo del huracán.
Calleja reaccionó en la segunda parte cambiando el dibujo por un 4-3-3, quitando a Iborra y Gerard Moreno por Bruno Soriano y Moi Gómez. El objetivo era controlar más y mejor el centro del campo. La respuesta de Setién, después de un par de ocasiones marradas, fue meter a Riqui Puig y a Rakitic por Luis Suárez y Semedo. Objetivo: recuperar el control.
Después de los goles de Suárez y Griezmann, faltaba Messi por ver portería. Tras celebrar el gol que llegó tras una conexión total de puro ADN Barça, a pase de Sergi Roberto, De Burgos Bengoetxea desde el VAR anuló el tanto por fuera de juego de Arturo Vidal, muy ajustado.
La reacción de Gerard Piqué dará mucho que hablar: se burló de la anulación imitando un teclado.
Al borde del minuto 90, un Ansu Fati que entró por Griezmann también se apuntó a la fiesta culé para marcar el 1-4 definitivo. Un gol de pillo: recibió el balón en el pico del área, y mientras miraba al tendido, cruzó el balón en otra dirección para sorprender tanto a los defensores como a Asenjo, que poco o nada pudo hacer más que estirarse.
La goleada pudo ser mayor: primero Sergi Roberto, que se le fue fuera poco, después Leo Messi con un disparo de falta al larguero y después Martin Braithwaite que tardó un siglo en disparar pudieron anotar el quinto con el 90 ya cumplido.