Eddie Johnson, histórico jugador de Atlanta Hawks, Cleveland Cavaliers y Seattle SuperSonics de los años 70 y 80, ha sido hallado muerto en su celda de la prisión estatal Santa Rosa Correctional Institution de Milton, Florida, donde cumplía cadena perpetua por abusar sexualmente de una niña de 8 años.

'Fast Eddie', como se le conocía, llegó a disputar dos All-Star y ser elegido en el quinteto ideal gracias a su calidad como base, pero en cuanto dejó el baloncesto a principios de los 80 comenzaron sus problemas con la justicia. 

Su adicción a la cocaína le llevó por un muy mal camino, que condujeron a ser detenido en múltiples ocasiones por robo con violencia, estafa, tráfico de drogas, proxenetismo y otros delitos. Fue un positivo en 1987 por esa sustancia la que derivó en su suspensión de por vida, cuando sólo tenía 32 años.

Su cadáver apareció el pasado 26 de octubre en su celda, aparentemente sin signos de violencia, pero no se ha confirmado su fallecimiento hasta días después.

Su vida criminal ha dado problemas a otro Eddie Johnson, exjugador de la NBA que disputó hasta 17 temporadas en la liga en años similares y con el que muchas veces le han confundido. Hasta tal punto llegó este problema que el hoy comentarista televisivo se planteó denunciar a los medios que usaban su foto, y no la del Eddie Johnson delincuente, para acompañar sus noticias.