El automovilismo español ha escrito otra línea de éxito gracias a Álex Palou. El barcelonés no necesitó acabar ni siquiera entre los mejores la última carrera del año, en Long Beach, para lograr lo que ningún español había conseguido: proclamarse campeón de la IndyCar. El cuarto puesto en esa carrera fue más que suficiente.

Álex Palou, el trotamundos español del automovilismo que ha hecho historia en la IndyCar

Aunque el reto era factible, el joven de 24 años no podía despistarse. Tuvo un susto antes del 'warm up': su coche, el número 10 del equipo de Chip Ganassi, tuvo que ser desmontado para solventar una fuga hidráulica. Un incidente que arreglaron sin mayores problemas y que no quitó ni un ápice de optimismo y ánimo al hombre que fue segundo en las últimas 500 millas de Indianápolis.

Ya desde la salida se vio que no iba a ser una carrera fácil. Patricio O'Ward, el primer candidato a arrebatarle el título a Palou, sufrió un golpe de Ed Jones en una de las horquillas, lo que le hizo trompear y quedarse al fondo de la parrilla. Palou lo vio desde lejos, pero lo esquivó.

El que no cedió en los primeros compases fue Josef Newgarden, el otro 'enemigo', se escapaba al frente pese a los intentos de Scott Dixon, campeón vigente hasta este año, por intentar pasarle. No le quedaba otra: el piloto de Penske necesitaba ganar o ganar para arrebatarle la gloria a Palou sin pensar en otras cosas.

Las cuentas del piloto de Nashville para batir a Palou eran 'fáciles': Tras la pole (un punto) y ser líder al menos en una vuelta (un punto), debía ser el piloto con más vueltas lideradas (dos puntos) y ganar (50 puntos) para obligar al español a ser, al menos, 23º. 

La batalla por detrás no fue menor. Romain Grosjean, que ha encontrado su sitio en la Indy tras su marcha de la Fórmula 1, fue de menos a más hasta protagonizar una buena persecución sobre el legendario Helio Castroneves. mientras detrás de ambos Simon Pagenaud y Colton Herta rozaban el accidente.

La carrera para O'Ward se acabó en la vuelta 20 de las 85. El Arrow McLaren SP del piloto de Monterrey se quedó tirado después de que el palier de la suspensión trasera derecha, que quedó afectada del toque en los primeros compases, se rompiese. Posteriormente salió a pista, con más de 30 vueltas perdidas, a la espera de que los abandonos le permitiesen lograr algún punto con el que batir a Newgarden por el subcampeonato.

Desastre para el mexicano, que ni siquiera pudo entrar en boxes, y para McLaren, que después de la decepción de Lando Norris en Rusia en la F1 veía cómo otra de sus opciones se iba al traste horas después.

El gran beneficiado de este incidente, obviamente, era Palou. Aprovechó este incidente para parar a cambiar neumáticos y repostar, algo que también hizo Newgarden, aunque a la postre le costó muy caro.

Nada más acabar este periodo de bandera amarilla, llegó otra: Marcus Ericsson y Alexander Rossi, dos expilotos de Fórmula 1, estaban peleando por posición cuando el sueco se fue contra el muro él solo. Con Colton Herta escapándose a mitad de carrera sobre Newgarden, estos incidentes jugaban a favor de Palou.

Palou pasa al ataque... en boxes

Pasada la vuelta 50, Palou decidió pasar al ataque. El barcelonés enseñó el morro de su Ganassi a Hinchcliffe para intentar pasarle por el 4º puesto, pero visto que el veterano piloto americano no cedía, decidió esperar. Un abandono en este momento, y adiós a sus opciones.

Por eso aprovechó la entrada en boxes que hubo a continuación para adelantarle y ponerse 4º virtual, más que sobrado por el título, y además con Jimmie Johnson, compañero de Palou doblado, colándose por delante de 'Hinch'. Una acción muy inteligente del equipo de Gannasi con 30 vueltas por delante.

Un toque entre Oliver Askew y Conor Daly provocó el cuarto parón de la carrera en forma de bandera amarilla... que beneficiaba a Palou. Cuantas más vueltas que no pudiera liderar Newgarden, más difícil que el estadounidense le quitase el título ante un eventual problema al final.

Campeón a falta de 17 vueltas

No fue necesario esperar. A falta de 17 vueltas, con Rinus Veekay e Callum Ilott en boxes y los demás abandonando, aunque Palou abandonase iba a acabar en 24ª posición por diferencia de vueltas dadas, que le iban a dar 5 puntos. Newgarden tampoco iba a poder sumar los dos puntos de líder con más vueltas, incluso pese a un eventual problema del imparable líder Herta, por lo que Palou ya era campeón virtual.

El vencedor de la prueba fue Colton Herta, que culminó una espectacular actuación saliendo desde la 14ª posición, y que dejó sin victoria a Josef Newgarden y a Scott Dixon, que cedió el cetro de campeón a su joven campañero.