Lewis Hamilton recuerda el racismo que vivió en España y el silencio de "gente que hoy sigue en la Fórmula 1"

Lewis Hamilton se ha autoproclamado el cruzado contra el racismo y a favor de la igualdad y la diversidad (y el veganismo) en la Fórmula 1. El heptacampeón del mundo mantiene su idea de dejar un legado más allá de lo que sus números, que a día de hoy sólo se comparan (e incluso superan en algunos aspectos) a Michael Schumacher, dicten.

Aunque no sea el mejor ejemplo para hablar de dificultades por el color de su piel (desde su infancia estuvo bajo el paraguas de McLaren, lo que le abrió muchas puertas) ni mucho menos sus inicios sean tan humildes como él presume (no así su padre, que sí tuvo que doblar su trabajo para permitirle que él compitiera cuando era un niño), sí ha vivido episodios racistas en algunos momentos de su vida. En concreto, ha hablado de lo que vivió en España después del convulso 2007 que compartió con Fernando Alonso.

En una amplia entrevista en 'The Wall Street Journal', Hamilton revive los test de invierno de la pretemporada de 2008 celebrados en el Circuit de Barcelona-Catalunya, en Montmeló. "Recuerdo el primer año en que entré a este deporte y experimenté el racismo de esta multitud y nadie dijo nada", señala. Según recuerda, había aficionados españoles que se dedicaron esos días a insultarle y abuchearle cada vez que salía de boxes en el circuito barcelonés. Esos mismos iban con la cara pintada de negro con unas camisetas en las que se leía "Familia de Hamilton".

"Había logrado mi sueño, pero no estaba feliz. No podía ser yo y en ese momento no tenía confianza en mí mismo, así que guardé silencio. Reprimimos tanto que no nos damos cuenta del dolor que estamos viviendo", analiza, y apunta al silencio que guardaron algunos miembros del paddock, sin decir nombres: "Hubo gente que no dijo nada y se quedó callada, gente que hoy sigue en la Fórmula 1", acusó.

De aquellos años, sin embargo, no guarda ningún rencor. "Amo España, especialmente la ciudad de Barcelona. El público en España siempre ha sido muy acogedor conmigo. Lo único que hice fue tratar de dar lo mejor de mí mismo", justifica.

Falta gente de otras razas en la Fórmula 1

La presión de Hamilton para que haya gente que no sea caucásica es un aspecto en el que está presionando con dureza. Hamilton pone un ejemplo: el equipo McLaren.

"Hace uno o dos años estaba hojeando fotos de la fiesta del equipo (McLaren, en el que militó entre 2007 y 2012) y me di cuenta de que los equipos todavía son blancos. Me preguntaba cómo podría ser esto después de que haya pasado tanto tiempo", señala. Consciente de que esto le puede granjear numerosas críticas, el piloto más exitoso de todos los tiempos afirma que está dispuesto "a correr el riesgo" de perderlo todo si consigue que haya más diversidad.

"No me importa. Ya sea por mi trabajo o mi reputación, quero que la comunidad negra sepa que estoy escuchándoles y que les apoyo", zanja al respecto.