El Mundial de Fórmula 1 está encarando su recta final con el título más disputado de los últimos años. Por fin, el Red Bull de Max Verstappen ha logrado competirle el campeonato a los Mercedes y el holandés es quien se encuentra liderando la clasificación, 12 puntos por encima de Lewis Hamilton. 

Con cinco carreras todavía por disputarse, o lo que es lo mismo, 125 puntos (más los otorgados por las vueltas rápidas y la última clasificación al sprint de la temporada), por lo que cualquier cosa puede pasar. Sin embargo, desde Mercedes ya se están temiendo que la escudería austriaca intente aprovechar esta oportunidad de volver a ser campeones del mundo por lo civil o por lo criminal.

Toto Wolff, CEO del equipo alemán, ha afirmado que no le extrañaría volver a ver una colisión entre Hamilton y Verstappen para que ninguno puntúe, con tal de que el de Red Bull gane, por fin, su mundial, como ya ocurrió en el GP de Italia... o para que lo haga el inglés. "Si llegara al escenario de la última carrera y estuvieran compitiendo entre sí por el título, quien estuviera al frente seguramente intentaría hacer lo mismo que en los años de Senna-Prost", aseguró.

Recordando el incidente entre ambos en Monza, se mostró comprensible con que se vuelva a dar una situación similar. "Si estás corriendo por el campeonato y ves que se desvanece porque el otro te está adelantando, ¿qué herramienta tienes además de la que te asegura que no pueda adelantar?", reflexionó.

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"Lo hemos visto en el pasado con Schumacher y Villeneuve, lo hemos visto con Senna y Prost dos veces", justificó. En el caso del alemán, de manera reincidente, aunque solo la de la segunda le costó una penalización de todos sus puntos por la intencionalidad de una maniobra que le hacía campeón del mundo. Prost y Senna también se echaron mutuamente para ganar mundiales años atrás, aunque en sus casos, sin penalizaciones. 

No obstante, Wolff asegura que él no es de esa escuela, aunque no puede decir lo mismo de los pilotos. "Yo nunca daría ese orden de chocar contra nadie pero si van a la última carrera y el que está por delante gana el campeonato, competirán entre sí, muy duro. No creo que puedan controlarlo, Hamilton y Verstappen, no creo que quieran controlarlo porque ellos son los gladiadores en sus máquinas", zanja.