La realidad del deporte femenino en España: el 83% de las niñas y adolescentes no hacen deporte de forma habitual

La Universidad Francisco de Vitoria (UFV) y Women’s Sports Institute, movimiento que impulsa el deporte practicado por mujeres, han presentado la I radiografía del deporte femenino en España. Un estudio que nos acerca a la realidad del deporte femenino en nuestro país, mediante una serie de datos estadísticos y factores puntuales que dibujan la situación de diferentes disciplinas femeninas.

Estamos hablando de un análisis de la presencia de la mujer en el deporte a nivel federado, que muestras una diferencia abismal entre el número de licencias en función del sexo. Un 76.5% de los deportistas federados son hombres, mientras que sólo un 23.5% son mujeres. Unas cifras que dicen mucho más si las comparamos con otros países como por ejemplo Francia, donde las mujeres federadas ascienden al 32% de las licencias.

Siguiendo la línea que dibuja ese dato concreto, llama especialmente la atención que el 12.6% de los hombres que practican algún deporte con asiduidad estén federados, por sólo el 3.7% de las mujeres. "Estamos estancados y sin políticas de promoción de la práctica deportiva en mujeres, no se producirán cambios", apunta Laura Múgica, socia fundadora del Think Tank Women's Sports Institute.

Esa falta de políticas de promoción podría ser precisamente la culpable de que todavía hoy en día sigan existiendo deportes claramente enfocados a la práctica femenina. El 90% de las licencias de gimnasia, el 75.3% de las de voleibol, el 69.2% de las de hípica, el 61.9% de las de patinaje, el 46.4% de las de natación y el 44.7% de las de atletismo pertenecen a mujeres. "Según el análisis de las cifras de deportes de equipo e individuales, vemos que las mujeres practican en mayor medida deportes individuales alcanzando en este caso un 26,1% del total de licencias, algo por encima de la media. Estos datos dejan para la práctica de deportes de equipo en mujeres un 19,2%”, concluye Laura Múgica.

Viendo las cifras que se manejan en el estudio, no es descabellado asegurar que el crecimiento del deporte femenino en España está lastrado desde sus inicios. Observar que el 83% de las las niñas y adolescentes españolas no hacen deporte de forma habitual, es cuanto menos chocante. "Hay que revisar en profundidad los planes de formación en edad escolar y queda mucho por hacer", remarca Nuria Mendoza, decana de la Facultad de Ciencias de la Salud y directora del Grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte de la UFV. "El sedentarismo es mayor en mujeres que en hombres siendo un 46% las mujeres y un 24% los chicos. La mayor tasa de abandono de la actividad física se produce en mujeres jóvenes entre los 16 y los 18 años", continúa. "España, debe revisar en profundidad y reformular sus planes actuales de formación deportiva escolar desde las edades más tempranas, poniendo foco en despertar el interés y el gusto por la práctica deportiva".

Sin embargo, todo la un giro esperanzador cuando hablamos de deporte de alto nivel, en el que el número de mujeres supone el 37.9% de los deportistas totales. "Sin duda es un dato inspirador y revelador del potencial del deporte femenino en el que la competición y la preparación del alto nivel, sí supone un reto atractivo para las mujeres", analiza Mendoza.

Finalmente, sin miramos la presencia femenina en los cargos de responsabilidad y gestión del deporte, la situación vuelve hacia atrás, al ver que sólo 13 de los 117 miembros de la Asamblea General del Comité Olímpico Español son mujeres. Esto es una muestra inequívoca de que la estructura de mando deportivo en España está constituida y por tanto dirigida prácticamente en exclusiva por hombres, con todo lo que ello implica. Queda mucho por hacer. 

"Es importante, urgente e imprescindible para el avance de la sociedad, del deporte y de las mujeres cambiar la cultura profesional de las instituciones y organismos deportivos, visibilizar la presencia de mujeres que ocupan puestos directivos y técnicos, introducir mecanismos efectivos de apoyo para las mujeres en las instituciones, e impulsar la formación en gestión y dirección técnica para las mujeres", concluye Múgica.