La última pole de la temporada 2021 de Fórmula 1 se la llevó Max Verstappen. Tal y como se preveía en las jornadas previas, la pelea estuvo entre él y su gran rival por el título, Lewis Hamilton y Max Verstappen, con Valtteri Bottas y Sergio Pérez como invitados y más escuderos que nunca. 

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Las diferentes estrategias de equipo decantaron la balanza a favor del neerlandés, ya que Red Bull, una vez más, demostró que están un paso por delante en el 'ajedrez' de las planificaciones. Mientras Bottas cuajaba una bochornosa clasificación una vez más (saldrá 6º), 'Checo' realizó la labor que se le exige en este contexto, si bien la tercera plaza de la parrilla la ocupará el inesperado Lando Norris.

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Por detrás, Carlos Sainz volvió a ser el mejor de los dos españoles. El de Ferrari, que tiene este fin de semana marcado en rojo para poder superar a su compañero Charles Leclerc y a su excompañero Lando Norris en la clasificación general, partirá a la última carrera del año en una gran 5ª plaza. Ligeramente peor lo hará Fernando Alonso, que buscará cerrar su primera temporada tras el regreso entre los puntos para cerrar su primera temporada  desde la undécima posición de la parrilla. El español se vio estorbado al final de la Q2 por Daniel Ricciardo, lo que le generó un gran enfado... especialmente cuando se enteró de que no había sanción.

La clasificación fue extremadamente igualada y con muchos factores de planificación a tener en cuenta. Red Bull empezó a cocinar el viernes lo ocurrido este sábado. Verstappen hizo su mejor vuelta en la Q2 con neumáticos blandos, que fueron los que más probó en tandas largas en los libres, lo que le hará salir a estrategia cambiada con respecto a Hamilton, que partirá con medios y, por tanto, estirará más su primera entrada en boxes.

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Aunque todo se decidirá en la carrera, en esta clasificación Mercedes se ha visto totalmente superado. Red Bull sí supo aprovechar el trabajo de rebufos con Sergio Pérez, ya que le permitió a su jefe de filas hacer una primera vuelta en la Q3 de las que hacen historia: le metió medio segundo a Hamilton. Mientras Bottas penaba por no hacer el ridículo (que al final hizo), el mexicano ejerció de escudero perfecto y le dio ese extra suficiente para que, pese a las dos décimas que mejoró el británico, no se le escapara la última pole del año.

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La salida del Gran Premio será un momento crítico. Hamilton y Verstappen se juegan el Mundial a una única carta, ya que el que quede por delante será campeón. En caso de que no puntúen ninguno de los dos (por culpa, por ejemplo, un accidente, que es lo que muchos se temían que iba a buscar Red Bull), el beneficiado será el neerlandés por mayor número de victorias. Sólo hay una improbable posibilidad para Verstappen si queda por detrás de Hamilton: ser décimo, marcar la vuelta rápida y que Hamilton sea 9º. En cualquier otra situación, el que quede por delante se lleva el título.