El Granada confirma la peor racha del Atlético de Simeone en Liga: cuarta derrota consecutiva

Joao Félix, ante Torrente en el Granada - Atlético
Joao Félix, ante Torrente en el Granada - Atlético
EFE
Joao Félix, ante Torrente en el Granada - Atlético

Ya es oficial: este es el peor Atlético de Madrid de la era Simeone. Nunca en los diez años del Cholo en el banquillo rojiblanco había enlazado cuatro derrotas ligueras consecutivas, y la última ha llegado en un campo que ha resultado más complicado de lo esperado. El Granada de Robert Moreno les ha retratado y ha ahondado en una realidad: el Atlético cierra 2021 fuera de los puestos Champions

El partido empezó de manera inmejorable para el Atlético. Lemar, empeñado en ser protagonista en este equipo, puso un balón filtrado a Joao Félix y este se echó la responsabilidad a la espalda para, con mucha clase, batir con un disparo cruzado a Maximiano. Solo habían pasado dos minutos de partido y a los de Simeone se les ponía el encuentro muy de cara.

El problema es que, como casi siempre ha pasado este año, al Atlético le cuesta cerrar las líneas atrás. Aunque Carrasco tuvo una buena internada que se secó pronto y Luis Suárez (el del Atlético) se mostró muy participativo, era el Granada quien más peligro generaba. Y fue en una acción individual del conjunto de Robert Moreno cuando llegó el empate. Darwin Machís cogió el balón en la zona de tres cuartos, y en cuanto recortó para encarar desde la frontal no se lo pensó: zapatazo y gol imparable para un Oblak que no se lo esperaba.

Al Atlético le pilló a contrapié el empate, y el partido se enrareció por culpa del árbitro. Primero, por una caída de Carrasco en el área; después, por un gol mal anulado a Joao Félix por presunta falta (no era) que provocó un gran enfado de los jugadores madrileños. No sería la primera bronca que recibiera Hernández Hernández en el encuentro.

La segunda mitad empezó de manera frenética. Joao Félix ganaba todas las carreras a la zaga nazarí, algo que a su vez también le acabó desesperando por los constantes fuera de juego. Precisamente un posible 'offside' puso otra vez en primera fila de protagonismo al colegiado: Jorge Molina vio cómo le anulaban un tanto por haber recibido supuestamente en posición ilegal, y así lo pitó el linier, pero el VAR lo corrigió: aunque el veterano delantero hizo intento de rematar, el balón se lo metió Oblak sin querer y, por tanto, fue legal.

A Simeone ya no le entraba la camisa en el cuerpo. Los cambios que metió (como quitar a Kondogbia, retratado en todas las ocasiones del Granada, incluido el gol) no dieron el resultado esperado y, de hecho, fue el conjunto local quien mejores ocasiones tuvo. Neva obligó a lucirse al portero esloveno del Atlético con un paradón marca de la casa, pero Correa replicó con una ocasión clarísima que se fue alta. Cunha, otro de los futbolistas de refresco, le dio más mordiente, pero sus ocasiones fueron estériles. No hubo heroica colchonera esta vez, y la palabra crisis ya está instalada en el vestuario rojiblanco.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento