Que Marc Márquez y Rafa Nadal son dos de los mejores deportistas de la historia de España está fuera de toda duda. Pero es que, además, ahora tienen historias paralelas.
El ocho veces campeón del mundo y el 21 veces ganador de un Grand Slam, pese a los siete años que los separan, han vivido un 2021 similar por culpa de las lesiones y Márquez busca ahora empezar un 2022 como el de Rafa.
Nadal sufre una lesión crónica en el pie izquierdo que le hizo pensar en la retirada, igual que le pasó al piloto de Honda tras su triple intervención en el hombro y la posterior diplopía que le obligó a poner fin a la temporada antes de tiempo.
El tenista se repuso hasta el punto de firmar una de las victorias más épicas de la historia de su deporte en el Open de Australia y, ante el inminente inicio de la temporada de MotoGP, Márquez ha decidido copiar su estrategia para volver a la gloria. El gran paso, ponerse en manos de su mismo médico.
En manos de Cotorro
El doctor Ángel Ruiz Cotorro es toda una eminencia en el campo de la traumatología, el médico de cabecera del equipo de Copa Davis y clave en el tratamiento del la lesión en el escafoides de Nadal.
Tal y como ha confirmado el portal motorsport.com, Marc Márquez y su entorno han decidido recurrir a los servicios del doctor para intentar dar un acelerón a los problemas del húmero que mantuvieron al piloto de Repsol apartado nueve meses y empezar el Mundial de 2022 con mejor pronóstico.
"De la mano de Samuel Antuña, el médico que me operó, decidimos ponernos a trabajar también con Ángel Cotorro, que es el médico de equipo de Copa Davis de Tenis. Con él hay un grupo muy bueno, al que ya visité varias veces este invierno, y en el que hay un fisioterapeuta, un preparador físico y otros roles", explicó Márquez en exclusiva al citado portal especializado en deportes de motor.
La búsqueda de médicos ajenos a MotoGP de Márquez y su entorno tiene su origen, en parte, en la falta de confianza en el equipo médico habitual de MotoGP, con Xavier Mir a la cabeza. Los problemas en el hombro del piloto español, tras la caída en Jerez 2020, no fueron tratados de la manera que esperaban.
La hoja de ruta de Márquez... y un optimismo moderado
Faltan menos de dos meses para el pistoletazo de salida al Mundial 2022 y la hoja de ruta de Márquez es clara. Primero, asegurarse de que la diplopía -visión doble- que le obligó a terminar antes de tiempo la temporada está superada al 100%, como parece.
Segundo, adaptarse a la nueva moto de Repsol Honda. Los primeros test con la RC213V de la pasada semana en Sepang no fueron todo lo positivos que cabría esperar, con el de Cervera perdiendo el control y yéndose al suelo en dos ocasiones.
Después, y probablemente con el Mundial ya empezado, llegará el reto de empezar a llegar carreras. Y es que el propio Márquez reconoció en la presentación oficial del equipo que, ahora mismo, no está lo suficientemente preparado para triunfar desde el principio:
"Las condiciones actuales no son para arrasar ni para ganar ni siquiera para podio. Pero podemos coger nivel para ganar el Mundial. Habrá que tener paciencia para ganar, igual que el año pasado que empecé luchando por 'Top 10' y acabé ganando carreras, es algo que he aprendido", dijo.
El pasado año, pese a su paso por el quirófano, fue capaz de demostrar su valía y subirse a lo más alto del podio. Su actitud y afán de superación pueden con todo, y no será de extrañar que en el Mundial de MotoGP 2022 se produzca el renacer del 'Nadal de las motos'.
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