Así es el nuevo tratamiento para que Nadal pueda seguir jugando al tenis: inyecciones para 'desactivar' el nervio

Nadal, con la Copa de los Mosqueteros en París
Nadal, con la Copa de los Mosqueteros en París
EFE
Nadal, con la Copa de los Mosqueteros en París

Rafa Nadal logró el domingo, otra vez, lo imposible: reinar en Roland Garros por decimocuarta vez con el añadido de estar atravesando uno de sus momentos más duros a nivel físico.

El 22 veces campeón de Grand Slam completó la gesta con su pie izquierdo, en el que padece una lesión crónica, completamente anestesiado para poder así olvidar el dolor y centrarse en el juego.

Una solución de emergencia que él mismo ha admitido que "no es posible alargar en el tiempo", por lo que en los próximos días se someterá a un nuevo tratamiento que determinará el futuro del rey del tenis de ahora en adelante.

Inyecciones de radiofrecuencia para desinhibir el nervio

La nueva estrategia médica que tiene como objetivo, no reducir la lesión, ya que se trata de una afección de por vida, sino facilitar el convivir y competir con ella, pasa por las inyecciones de radiofrecuencia.

Una técnica con la que el balear espera poder tener una sensación parecida a la que ha tenido en Roland Garros, donde ha jugado con el pie totalmente dormido, pero menos radical, con los nervios "desinhibidos", tal y como él detalla:

"Esto es algo que me ha ido bien ya y que me quitó el dolor en el pasado. Consiste en Inyecciones con radiofrecuencia pulsátil que me podrían ayudar a disminuir la sensación que tengo en el pie", explica Nadal sobre su dolor.

"A ver si con este tratamiento podemos dejar el nervio medio dormido y tener esa sensación que sea más permanente, aunque me deje con el pie sin tanta sensibilidad", añade el tenista, poniendo sobre la mesa la cruda realidad: la única manera de seguir jugando es reducir su propia consciencia del pie porque, de lo contrario, el dolor no desaparece. 

"Si funciona, perfecto, si no..."

Ahora mismo, el equipo médico con el que cuenta el balear, con el doctor Cotorro a la cabeza, ha puesto todas sus esperanzas en que el tratamiento funcione porque de él dependerá el futuro inmediato de Rafa.

De no surtir efecto, admitía el propio Nadal, no tiene idea de cuál será el próximo paso a seguir y ni él mismo sabe si podrá o no continuar jugando al tenis aunque "mientras pueda", dijo, lo seguirá intentando. 

Wimbledon, en un horizonte muy cercano

Nadal, que ha conquistado los dos Grand Slam que se han disputado en lo que va de 2022, Open de Australia y Roland Garros, con dolorosas recaídas entre ambos y arrastrando el dolor del pie que le lastra, no ha descartado estar en la hierba inglesa del torneo de Wimbledon en menos de un mes.

Algo que, aunque parezca descabellado, no se puede descartar viniendo de un deportista con el espíritu de lucha, la cultura del esfuerzo y la fortaleza mental del balear. 

Sin embargo, la hoja de ruta la tienen clara él y su equipo: hoy es hoy y mañana ya se verá. No se permite Nadal pensar mucho más allá del día a día; no lo ha hecho nunca y, ahora, además, no puede hacerlo: el estado de su pie manda y sólo si el tratamiento funciona, podrá seguir forjando su leyenda hasta que llegue el duro momento que todos tememos de decir adiós. 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento