Asier Martínez tiene motivos más que de sobra para lucir músculos. La medalla de oro en el Europeo de Múnich la guinda para un pastel que tenía como base el bronce logrado hace un mes en el Mundial de Eugene. El rey europeo de los 110 metros vallas es ya parte de la historia del atletismo español... y no hay más.

Así fue la sobrenatural victoria de Asier Martínez por una milésima para ganar el oro en el Europeo

Sin embargo, el éxito de este atleta navarro de 22 años no es flor de un día. Asier Martínez lleva años llamando a la misma puerta que ahora ha tirado de una patada. Su puesta en escena en el Campeonato de España de 2020 no fue más que la primera baldosa amarilla del camino por el que ahora pasea con su oro continental al cuello.

En 2021 acabó cuarto en el Europeo de Torun de pista cubierta. El mismo puesto que firmó en el Mundial de Belgrado también bajo techo. Asier se quedó a un paso del podio y lo vio un poco más desde lejos en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde acabó sexto. A partir de ahí, comenzó la explosión que ahora estamos disfrutando.

Asier Martínez vuela para convertirse en campeón de Europa de los 110 metros vallas

Su talento es innegable, así como su buen hacer cada vez que pone un pie en el tartán. Tiene un físico envidiable de 1.90 y 80 kilos de puro músculo y potencia natural que su entrenador François Beoringyan ha sabido perfilar para llegar a lo más alto de un ranking que le permitió saltarse la ronda de clasificación en Múnich.

Martínez llegó a Alemania como líder del ranking europeo y pasó a la acción directamente en semifinales. Esa carrera la ganó sobrado, perdón, sobradísimo. Tanto que se permitió intercambiar miradas y sonrisas con el segundo clasificado, el francés Just Kwaou Mathey, en los últimos metros.

En la gran final las risas tuvieron que esperar hasta la decisión final tras la foto finish. Asier tuvo un tiempo de reacción pasmoso (0.149) y pugnó con Pascal Martinot-Lagarde valla tras valla hasta llegar parejos a la línea de meta. Una milésima dio la victoria y el oro europeo al español.

Una milésima que valió un oro y que consolidó a un atleta cuya confianza está por las nubes desde Eugene. El mismo chaval que corría por su pueblo siendo sólo un niño y se formó en la Escuela del Pamplona Atlético ahora se sienta en el trono continental de los 110 metros vallas con sólo 22 años.