No ha podido tener peor suerte Marc Márquez en su vuelta a los circuitos. El seis veces campeón mundial de Moto GP llegaba al circuito de Motorland Aragón sin grandes expectativas pero sí con ilusión de regresar a la parrilla y recuperar sensaciones. 

Pero todo se ha ido al garete en la primera vuelta. Márquez, que partía decimotercero, ha cometido un error a la salida de una curva en la primera vuelta y no ha podido evitar que, por detrás, el líder del Mundial Fabio Quartararo, le embistiera. El francés ha terminado por los suelos y Márquez con la moto seriamente tocada. Cuando el español ha regresado a boxes, apenas ha habido discusión: abandono.

Márquez, que ha podido llegar al box andando, no parece haber tenido ninguna dolencia física tras el accidente, la mejor noticia posible, todo lo contrario que Quartararo, que presentaba un visible arañazo después de haber chocado contra el asfalto.

La maniobra no ha tardado en llegar a las redes sociales, donde han sido muchos los que han acusado a Márquez de imprudente por esa reducción de velocidad en la recta que ha provocado el choque con el piloto galo.

"Todo ha pasado en la vuelta 3  -explicaba Marc- me he encontrado a dos pilotos en adelantamiento y he tenido que cortar gas. En ese momento, supongo que Quartararo estaba preparando su adelantamiento y no ha podido evitarme. Encima, una pieza de su carenado ha entrado en mi rueda y no me he dado cuenta hasta la vuelta siete, cuando la moto se me ha vuelto a ir y he tocado a Nakagami".

Márquez intentaba al menos sacar el lado positivo tras lo sucedido: "Tenía muchas ganas de terminar y acumular kilómetros, pero al menos todos estamos bien. Hay que seguir trabajando".