El curso tenístico 2022 de Rafa Nadal está terminando de una forma totalmente contraria a como arrancó. El español llegó a sumar 20 victorias consecutivas, entre ellas la que le dio su segundo Open de Australia, y después se hizo con el decimocuarto Roland Garros, sin embargo, el último tramo del año está siendo realmente complicado. Este domingo cayó ante Fritz, confirmando una mala racha que no vive desde 2009.

Los tres últimos partidos de Nadal han terminado de la misma manera, con derrota para el balear, ahora lejos de su mejor versión mostrada hace apenas unos meses. El número dos del mundo arrancó la temporada a un ritmo inalcanzable y llegó invicto al 19 de marzo, día de la final del torneo de Indian Wells en la que cayó ante Taylor Fritz.

Taylor Fritz amarga el debut de Rafa Nadal en las ATP Finals

Las lesiones volvieron a aparecer en el peor momento para Rafa, antes de la temporada de tierra, algo que, por otro lado, no evitó que se hiciera con su Roland Garros número 14. Además, llegó con todo a Wimbledon, donde solo una lesión le privó de jugar las semifinales que había alcanzado batiendo al propio Fritz.

Ese fue el gran momento de inflexión para él esta temporada, pues después encadenaría una sucesión de tropiezos muy influenciados por los problemas físicos. Se probó en Cincinnati y cayó a las primeras de cambio ante Coric, el esfuerzo titánico del US Open le sirvió hasta octavos, donde fue derrotado por Tiafoe, en primera ronda del Masters 1.000 de París Tommy Paul fue su verdugo, y su última comparecencia ha sido en las ATP Finals, con otra derrota, la tercera seguida, ante Fritz.

Tres estadounidenses han conseguido forzar un hito negativo en la carrera del vencedor de 22 'grandes', el hecho de que sume tres derrotas consecutivas, algo que no sucede desde hace trece años (2009). En aquella ocasión fue también en la recta final de la temporada: Novak Djokovic en las semifinales del Masters 1.000 de París, y Soderling y Davydenko en las Finals.

En aquel año la racha fue aún peor, pues de nuevo volvió a ceder ante Djokovic en el tercer partido de la fase de grupos de la Copa de Maestros, sumando cuatro derrotas consecutivas. Eso sí, la vuelta del español a la competición fue inmejorable, pues ganó dos partidos seguidos en la Copa Davis, que valieron para levantar la ensaladera ante República Checa.