El Mundial de Qatar ha llegado a su fin después de un intenso mes de competición sobre el que ahora toca reflexionar. Argentina ya es campeona del mundo, pero el torneo ha ofrecido mucho fútbol y muchas más historias más allá del campeonato 'Albiceleste'. ¿Qué selecciones han decepcionado? ¿Cuáles han sorprendido? Lo analizamos.

Muy deficiente: Qatar

Más allá de todas las polémicas extradeportivas que han rodeado al Mundial de Qatar y al país arábigo como organizador, su presencia deportiva en la Copa del Mundo como anfitriones ha dejado muchísimo que desear. Si bien es cierto que no es una gran potencia a nivel futbolístico, apenas logró un gol y no sumó puntos en su grupo, por lo que su paso por el torneo apenas fue testimonial. La peor anfitriona en la historia de los mundiales.

Suspensos: España, Alemania, Bélgica y Uruguay

Alemania se quedó a las puertas de pasar a octavos de final por segundo Mundial consecutivo, un récord nada positivo para una ‘Mannschaft’ necesitada de una renovación urgente en todos los ámbitos. Tienen grandes nombres, pero aún no son un equipo, aunque quizá merecieron más de lo que obtuvieron, pero aquella derrota inesperada de España ante Japón les dejó en la estacada por depender de otros resultados para clasificarse. Al menos Hansi Flick no renunció a la selección y seguirá trabajando en el proyecto.

De Bélgica se esperaba mucho en esta Copa del Mundo. Era un proyecto sólido y trabajado con Roberto Martínez a la cabeza y con nombres tan importantes como Courtois, De Bruyne o Lukaku. Sin embargo, el descalabro fue mayúsculo, aunque cayeron ante dos semifinalistas como Croacia y Marruecos. La imagen de Eden Hazard fue la imagen belga en Qatar.

Uruguay, bicampeona mundial, también pintaba como un equipo sólido con opciones de sorprender. Sin embargo, la veteranía de Luis Suárez o Cavani y la intensidad de estrellas mundiales como Valverde o Darwin Núñez no fue suficiente para pasar de grupo, y sucedió lo mismo que con Alemania: otro resultado ajeno dejó fuera a los 'charrúas'.

El caso español da para analizar largo y tendido, pero se puede resumir en un despropósito de Mundial. El seleccionador Luis Enrique, más pendiente de sus redes sociales que de la táctica, y una generación a años luz a nivel de talento y entrega con respecto a los ganadores en Sudáfrica en 2010 condenaron a España. La derrota ante Japón disipó el espejismo del 7-0 a Costa Rica, y Marruecos nos mandó para casa en penaltis en octavos.

Aprobados: Portugal, Brasil y Estados Unidos

Portugal cumplió llegando a cuartos de final, aunque adoleció de la pegada que le sobró el resto del torneo para someter a la misma Marruecos que eliminó a España. Los problemas extradeportivos de Cristiano Ronaldo lastraron a los lusos y al propio CR7, que se despidió de los mundiales desde el banquillo. Mala gestión de Fernando Santos, pero buen torneo para Bruno Fernandes o Gonçalo Ramos.

Brasil decepcionó por todo lo que prometía su potencial ofensivo. De hecho, murieron en la orilla de los penaltis contra Croacia en cuartos de final. Hasta entonces, fue la selección que mejor juego desplegó. Sin embargo, el empeño de Tite por cambiar a Vinicius Jr. siempre pronto en los partidos le acabó pasando factura. Tanto él como Neymar destacaron, pero se atascaron y dijeron adiós antes de lo que todo el mundo pensaba, ellos incluidos.

La selección estadounidense era una de las que más sonaba por potencial de crecimiento para dar la sorpresa en el Mundial. Finalmente no lograron pasar de octavos ante una gran selección neerlandesa, pero demostraron todo su potencial y superaron su grupo sin conocer la derrota, ni siquiera ante Inglaterra. Combinado con mucho futuro que acogerá parte del Mundial 2026.

Notables: Países Bajos, Inglaterra, Francia y Australia

Aunque quedaron a dos penaltis de las semifinales, el torneo de Países Bajos es encomiable. Los de Van Gaal, sin grandes nombres entre sus filas, dominaron su grupo y dominaron durante buena parte de los cuartos a Argentina. Solo la tanda de penaltis pudo separarles de regresar a unas semifinales de la Copa del Mundo. Gakpo fue una de las revelaciones, y De Jong y Van Dijk parecieron recuperar su nivel élite por momentos.

En el caso de Inglaterra, su juego vistoso y directo prometió más de lo que lograron, aunque fueron los animadores del torneo. Por nombres y potencial, una de las cuatro mejores del campeonato, que tuvo la mala suerte de topar con la campeona Francia antes de tiempo. Un penalti fallado por Harry Kane condenó a los ‘Tres Leones’, que no pudieron llevar ‘a casa’ un trofeo que ganaron únicamente en 1996, en casa.

Australia es la que más se merece encontrarse entre los notables, sobre todo teniendo en cuenta su potencial. Puso en apuros a Francia y derrotó a Túnez y Dinamarca en su grupo, solo para caer en octavos ante la eventual campeona Francia. Una de las revelaciones del torneo.

Por último, Francia baja un peldaño su clasificación después de haber perdido una final que, por otro lado, no mereció ganar. El torneo para los galos tuvo sus altibajos, con las bajas de Benzema y Lucas y la derrota ante Túnez. Cuando llegaron las eliminatorias, fueron una selección mucho más compacta. Ya en la final, prácticamente no se presentaron a jugarla, y solo los chispazos de Mbappé la mantuvieron con vida. Los penaltis dictaron sentencia, y Francia estropeó un sensacional campeonato con una mediocre final en la que apenas quisieron jugar 15 minutos.

Sobresalientes: Croacia, Marruecos, Japón y Argentina

De las cuatro mejores selecciones del Mundial de Qatar, solo una no fue semifinalista. Japón, por la escasa cultura futbolística existente y su abismal diferencia de calidad respecto a las demás selecciones de su grupo, es la mayor sorpresa de la Copa del Mundo. Vencieron a Alemania, vencieron a España, pasaron primeros de grupo, y solo Croacia y en los penaltis fue capaz de pararles los pies. 

Marruecos fue la auténtica sorpresa y revelación mundialista. Poco que añadir a lo que no se haya dicho ya. Regragui cogió el seleccionado marroquí en Agosto, resolvió los problemas internos y creó un equipo de autor. Solo pudieron con ellos la campeona, Francia, y la subcampeona, Croacia. La primera selección africana y árabe en superar los cuartos de final de la Copa del Mundo. Historia viva del deporte mundial.

Croacia también volvió a hacer historia, emulando sus participaciones en 1998 y 2018. Con un Luka Modric erigido en líder y director de orquesta absoluto, y un Gvardiol que fue el mejor central del torneo, fueron dejando en la estacada a sus oponentes, incluyendo Brasil, gracias a las prórrogas, los goles ‘in extremis’ y los penaltis, igual que en 2018. Finalmente, derrotaron a Marruecos por el bronce del Mundial, y suman tres podios en apenas seis participaciones en la Copa del Mundo.

Argentina por fin logró romper una ‘maldición’ de 36 años. A base de coraje, mentalidad ganadora y magia, sumó su tercera estrella. La magia que puso Lionel Messi al servicio de su país para ganar el único trofeo que le faltaba, y eso que dieron la primera sorpresa del campeonato al caer en el primer partido con Arabia Saudí. Argentina se repuso, fue mejorando con cada partido, hasta la final. Así, hizo honor a Maradona, ganó por penaltis una final que pasará a la historia por su intensidad, y ofreció a Messi la confirmación definitiva e irrevocable: ya es el mejor jugador de la Historia.