El partido entre los Pistons y Magic de este miércoles, que terminó con la victoria de Detroit sobre Orlando por 121-101, quedó empañado por un episodio bochornoso: una pelea que arrancó con un empujón en la pista en la disputa de un balón y continuó con un peligroso golpe en la nuca.

Cerca del final del segundo cuarto, cuando la franquicia de Míchigan se imponía en el marcador 19 puntos por encima de su rival, el pívot de Magic, Moritz Wagner, metió el cuerpo y empujó a Killian Hayes cuando ambos corrían para atrapar un balón, haciendo que este cayese sobre su banquillo.

El gesto del alemán no sentó nada bien a los Pistons, que rápidamente envolvieron al jugador de Orlando en una tangana para recriminarle el gesto. Entonces, el '7' de los Pistons se levantó muy enfadado y propinó a su rival un golpe muy peligroso en la nuca.

Wagner pareció caer 'fulminado', como si se hubiera desmayado, encima de varios jugadores de Detroit que se encontraban en la banca, lo que provocó que el resto de la plantilla de Orlando se metiese en la revuelta para defenderle. 

Fueron momentos de mucha tensión, con empujones de ambos bandos, algunos puñetazos e intentos por separarles para que el incidente no pasase a mayores. Al final, los árbitros resolvieron la pelea expulsando al alemán, a Hayes y a Diallo, que había propinado algún golpe durante el altercado.

El alemán se incorporó sin problemas mientras la tangana aún seguía desarrollándose y caminó por el exterior de la pista tocándose la parte de atrás del cuello.