Más de dos años han pasado desde el fallecimiento de Diego Armando Maradona sin que aún se resuelvan las circunstancias de su muerte, por la que se imputó a los ocho profesionales médicos encargados de la salud del argentino. La Cámara de Apelaciones de San Isidro (Buenos Aires) decide este martes si la causa pasa a juicio como "homicidio con dolo eventual" o con una "calificación más leve".

A la vista convocada para este 7 de marzo acudirán Agustina Cosachov, psiquiatra, y Pedro Di Spagna, médico clínico, así como la enfermera Daiana Gisela Madrid, para ampliar sus argumentos de apelación y evitar que se trate en el juzgado como homicidio con dolo eventual, penado con entre 8 y 25 años de cárcel, recoge la agencia de noticias argentina Télam.

En este sentido, la Fiscalía considera que hubo irregularidades en el tratamiento médico recibido por el argentino y "ausencia de interposición de acción salvadora alguna que pudiera evitar el deceso" de Maradona, así como una "aceptación interna" de la muerte, según recogieron medios locales de la resolución del juez de Garantías de la localidad que elevó la causa a juicio, Orlando Díaz.

Autopsia y conclusiones de los peritos

La autopsia realizada al exfutbolista tras su muerte a los 60 años determinaba que el deceso se debía a un "edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada". También se descubrió en su corazón una "miocardiopatía dilatada".

La junta médica perital que ha estado investigando las circunstancias de su fallecimiento, recuerda la misma agencia, revelaron que el astro, que padecía de varias patologías, había agonizado 12 horas antes de morir, no estaba "en pleno uso" de sus capacidad mentales y habría tenido más posibilidades de vivir de haber sido ingresado en un centro sanitario.

Asimismo, consideran que el equipo médico conocía el estado de Maradona y eran conscientes de la "posibilidad del resultado fatal respecto del paciente, informa Télam, y aún así se mostraron "indiferentes", y no cambiaron "sus conductas y el plan médico trazado", por lo que mantuvieron "las omisiones perjudiciales" y "abandonaron 'a la suerte" la salud del exseleccionador argentino.

El resto de imputados son el psicólogo Carlos Díaz, la médica que coordinaba los cuidados domiciliarios Nancy Forlini, el coordinador de los enfermeros Mariano Perroni y el enfermero Ricardo Omar Almirón.