Dos expulsiones en sus tres últimos partidos ha sufrido Casemiro en la Premier League. El jugador brasileño vio de nuevo la tarjeta roja directa este domingo en el partido entre el Manchester United y el Southampton por una durísima entrada y será sancionado con cuatro partidos sin jugar. 

La jugada tuvo lugar en el minuto 34. Casemiro fue a robarle el balón a Carlos Alcaraz, pero lo hizo con los tacos por delante y a la altura de la espinillera del jugador del Southampton. El colegiado Anthony Taylor fue llamado por el VAR y, al ver la acción, no lo dudó: mandó al exmadridista a los vestuarios. 

No protestó la tarjeta roja el centrocampista, consciente de que la acción había sido desmedida y merecedora de la expulsión. Al ver la cartulina, Casemiro asumió el castigo, se abrazó con su compañero Antony, se secó alguna lágrima que le cayó, se disculpó con Carlos Alcaraz y se fue cabizbajo a los vestuarios tras recibir el consuelo de David de Gea. 

Fue precisamente el portero español el héroe del partido, pues sus paradas salvaron un punto para los red devils, que finalmente sacaron un empate sin goles ante el Southampton. 

Casemiro, que ya fue expulsado en el partido ante el Crystal Palace, se perdió entonces tres partidos y ahora será sancionado previsiblemente con cuatro encuentros sin jugar en una mala racha sin precedentes en su carrera.