Karim Benzema, un hat-trick para convertirse en la gran esperanza madridista

Con la Liga casi perdida para el Real Madrid, solo pendiente de un milagro que parece lejos de producirse, al conjunto blanco le toca aferrarse a los torneos del KO, con las semifinales de la Copa y los cuartos de final de la Champions como grandes desafíos y un nombre como gran esperanza: Karim Benzema.

Este Real Madrid depende de Benzema. Para bien y para mal. Su planificación ha sido la de contar con un solo delantero puro en toda la plantilla –Mariano ni está ni se le espera– y el vigente Balón de Oro representa la ilusión del equipo blanco para arreglar una temporada que, pese a que ya cuenta con dos títulos (Supercopa de Europa y Mundial de Clubes), está siendo ciertamente irregular y algo decepcionante, especialmente por cómo está yendo la competición liguera.

Fiarlo todo a un delantero de 35 años, por mucho que fuera el mejor jugador del mundo el año anterior, era una apuesta arriesgada, y el club blanco lo ha pagado. La temporada de Benzema no ha sido tan buena ni tan regular como la anterior, y el equipo de Carlo Ancelotti ha echado y mucho de menos sus goles durante varios tramos de la temporada, especialmente en la Liga.

Benzema se ha perdido más de un tercio de los partidos del campeonato doméstico (10 de los 27) y su número de goles ha bajado. Y una estadística llama la atención: de entre los nueve tropiezos ligueros (tres derrotas y seis empates), el francés solo marcó en uno de ellos, ante el Villarreal (2-1) y desde el punto de penalti.

A la gran referencia ofensiva del equipo, el Real Madrid le ha echado de menos cuando peor dadas han venido y eso ha sido un lastre ante un Barcelona que está siendo un rodillo y que apenas falla.

Pero ha llegado la primavera, Benzema ha tenido un par de semanas completas para recuperar fuelle y ponerse a tono –al galo se ha visto, en demasiadas ocasiones, exhausto físicamente– y ante el Valladolid mostró su mejor versión. A sus tres goles unió un juego fresco, dinámico, que denota que se puede contar con él para la parte final de la temporada, donde se juegan los títulos... y sobre todo Europa.

Este miércoles espera el FC Barcelona, con el difícil reto de remontar el 0-1 del partido de ida. Y la semana que viene el Chelsea, equipo al que el año pasado le hizo nada menos que cuatro goles en la eliminatoria que les enfrentó, también en la antepenúltima ronda. Si el Real Madrid quiere hacer algo, lo que está claro es que necesita los goles de Karim Benzema.