Día aciago para el mundo de los deportes de motor. El irlandés Craig Breen, piloto del equipo Hyundai en el Mundial de Rallies (WRC), ha fallecido este miércoles a los 33 años en un accidente sufrido durante un entrenamiento para el Rally de Croacia, en el norte del país balcánico.

Según fuentes policiales, el automóvil de Breen, compañero de equipo que se turna en el tercer Hyundai i20 N Rally1 con el español Dani Sordo, chocó con el costado izquierdo de la parte delantera de su coche contra un poste de madera, lo que provocó la muerte de Breen en el acto, aunque por suerte su copiloto no sufrió heridas graves.

El accidente tuvo lugar a las 10:40 de la mañana, hora local, entre las localidades croatas de Stari Golubovac y Lobor, durante unas pruebas para el Rally de Croacia, que se disputará del 20 al 23 de abril, donde Breen estaba preparándose para efectuar su segunda aparición de la temporada. El irlandés, además, venía con un ‘subidón’ de moral tras haber peleado por la victoria en la anterior prueba en Suecia.

Posteriormente, fue Hyundai Motorsport quien confirmó el deceso del piloto: "Hyundai Motorsport se entristece profundamente al confirmar que el piloto Craig Breen ha perdido la vida hoy tras un accidente durante el test previo al Rally de Croacia. Hyundai Motorsport envía sus más sinceras condolencias a la familia, los amigos y los numerosos seguidores de Craig. Hyundai Motorsport no hará más comentarios en este momento".

Del mismo modo, el comunicado disipó las dudas sobre el copiloto de Breen: "El copiloto, James Fulton, ha resultado ileso en el incidente, que ocurrió poco después del mediodía, hora local". La desgracia, además, ya perseguía a Breen desde hacía 11 años, aunque en aquella ocasión se cebó justamente con su copiloto. El 16 de junio de 2012, Gareth Roberts, apodado 'Jaffa', con el que se proclamó campeón en el WRC Junior en 2011 con un Ford Fiesta, también falleció en un incidente durante el Rally Targa Fiorio en Sicilia.

La carrera deportiva de Craig Breen fue tan exitosa como complicada, pero su talento nunca estuvo en duda. Además, Breen fue un piloto muy querido en los circuitos y competiciones por los que pasó, y apenas había podido brillar con luz propia en el Europeo y ganarse un asiento en la máxima categoría del Mundial, donde ya acariciaba su primera victoria profesional.