El Real Madrid anunció a finales del pasado mes de marzo su decisión de personarse como acusación particular en la causa contra el FC Barcelona por el 'caso Negreira'. Lo hizo como parte perjudicada, algo que no sentó bien en el Camp Nou y que desde las defensas de sus expresidentes Rosell y Bartomeu trataron de impedir sin éxito, pues la Fiscalía se ha mostrado ahora favorable a ello.

Anticorrupción ha comunicado a la jueza a través de un escrito que considera que, como integrante de la competición que supuestamente pudo haberse visto alterada por los pagos de la entidad culé al vicepresidente del CTA, el conjunto blanco, así como cualquier otro equipo de LaLiga, puede ser considerado perjudicado.

La postura del ministerio público se conoce el mismo día en el que sale a la luz que Sandro Rosell, presidente del Barça de 2010 a 2014, ha solicitado que la petición del Real Madrid sea inadmitida por dos razones: primero, porque su patrimonio no se vio afectado, y segundo porque no es el organizador de ninguna competición. 

Los datos de Real Madrid y Barça durante el régimen de Franco

Además, ya se han personado la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) y LaLiga, que representa en sí misma a todos los clubes que participan en la competición nacional. El mismo argumento utiliza también otro expresidente, Josep María Bartomeu, que dirigió el club tras la marcha de Rosell en 2014 y hasta 2020.

El predecesor de Joan Laporta en el cargo considera que el Real Madrid no ha argumentado "el más mínimo indicio de perjuicio", y cree que aceptarle como parte perjudicada en la acusación particular "llevaría a un procedimiento de imposible instrucción", ya que podría hacer que otros clubes siguiesen sus pasos.