Tras unas semanas en las que ha recibido numerosas acusaciones desde diferentes organismos, el arbitraje profesional ha emitido un comunicado para defenderse de todas esas informaciones y dejar claro que no irán a huelga, desmintiendo así los rumores de las últimas horas.

"Desde el arbitraje profesional del fútbol español queremos trasladar nuestra profunda preocupación por la lamentable situación que se ha generado en torno al colectivo que representamos y que se impulsa y promueve desde diferentes frentes del fútbol profesional en lo que consideramos una campaña perfectamente medida y organizada", comienza diciendo el escrito del Comité Técnico de Árbitros.

Desde el estamento arbitral atacan también a Javier Tebas y LaLiga, acusándoles de una campaña de desprestigio por su parte: "El vídeo difundido por su director de Competiciones, Luis Gil, tratando de señalar y ridiculizar las actuaciones arbitrales, es una muestra más del interés de La Liga en generar un clima irrespirable hacia nuestro colectivo, sembrar la duda sobre nuestras decisiones y menoscabar la profesionalidad arbitral".

Critican que desde la cúpula de LaLiga se lamente "una crisis reputacional en el fútbol español" mientras que colaboran "a generarla a través de una llamada a la crispación y a la violencia contra los árbitros".

Además, quieren dejar claro que "el CTA no designa a los árbitros, sino que lo hace un órgano denominado CACP (COMITÉ DE DESIGNACIÓN) donde está presente un miembro de la RFEF, un miembro de La Liga y otro miembro de designación por común acuerdo o, si no existiera, por el CSD".

Por último, piden que se haga "una profunda reflexión ante comportamientos tan irresponsables que deben detenerse cuanto antes por el buen nombre del fútbol español" puesto que tiene que entenderse "como un DEPORTE en el que debe existir pasión y emoción, y donde los protagonistas tienen errores y aciertos; dirigentes, jugadores y árbitros".

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Sobre los últimos episodios que han sufrido los árbitros de categorías inferiores, lo califican de "algo intolerable y efecto directo de la campaña mediática de desprestigio que sufrimos por parte de La Liga y los clubes profesionales".