A pesar del bache de rendimiento que está sufriendo Aston Martin en este último tramo intermedio de la temporada de Fórmula 1, es innegable que su desarrollo de un año para otro ha sido el más exagerado que se recuerda desde Brawn GP. En ese crecimiento ha tenido su parte de culpa Fernando Alonso, incluso el ya retirado Sebastian Vettel, pero sin duda la clave han sido los fichajes estratégicos de Lawrence Stroll.

Primero Dan Fallows, mano derecha de Adrian Newey en Red Bull, y después Eric Blandin, jefe de aerodinámica durante los mejores años de dominio de Mercedes, se unieron al equipo británico para desarrollar el AMR23. Dos incorporaciones de relumbrón y prestigio que revolucionaron una escudería necesitada de una inversión así para destacar de la mano del bicampeón asturiano.

Sin embargo, como todo el mundo ha podido ver, en las últimas carreras el coche se ha estancado. El efecto de las mejoras que lucieron en Canadá se esfumó como por arte de magia, y muchos comenzaron a rumorear sobre la intención de Aston Martin de centrarse ya en el coche de 2024. Puede que no sea cierto, porque se espera un auténtico paquete de evoluciones tras el parón veraniego, pero los movimientos del multimillonario dueño del equipo indican que no quiere dormirse en los laureles.

La revolución que prepara Aston Martin para devolver a Alonso al podio

De hecho, 2024 ha sido siempre el año señalado internamente por voces autorizadas de Aston Martin para asaltar con credenciales el Mundial de pilotos y el de constructores. Y pensando en ello, han cerrado la contratación del neerlandés Thijs van Rees, ex de Red Bull, para ocupar el puesto de aerodinamicista jefe del equipo verde y fortalecer aún más un departamento que terminará de explotar su potencial gracias a la nueva fábrica y el nuevo túnel de viento que estrenarán próximamente.

Van Rees además no es un cualquiera. Trabajó en Mercedes al inicio de su carrera, donde pasó a ser aerodinamicista sénior ganando cuatro mundiales por el camino. En 2021, dio un giro a su trayectoria y se unió a Red Bull, donde se convirtió en pieza fundamental de su resurgir y actual dominancia en estos dos primeros años de la nueva era.

Un palmarés destacable al que se une, además de su experiencia en los mejores equipos del paddock, un dato más que curioso que facilitará su adaptación a Aston Martin y mejorará su trabajo en equipo. Y es que el ingeniero de Países Bajos ya trabajó bajo las órdenes de Blandin, subdirector técnico, en Mercedes y bajo las órdenes de Fallows, director técnico, más recientemente en Red Bull.

Un cúmulo de aptitudes y circunstancias que le hacen el candidato con el perfil idóneo para ocupar una parcela desmejorada de Aston Martin desde que Guru Johl abandonase su puesto hace unos meses para formar parte de la restructuración completa del equipo Alpha Tauri, filial de Red Bull. Contrataca Aston Martin con otro fichaje 'robado' a sus grandes rivales, con el objetivo entre ceja y ceja de ser los mejores en 2024.