Derrota del Real Madrid ante la Juventus (3-1). El peor final de la gira estadounidense para el conjunto blanco, que lejos de resarcirse del tropiezo ante el Barça, confirmó las dudas en defensa, la mala suerte de cara a portería y que necesita más que nunca a Kylian Mbappé. Solo Vinícius tuvo premio, aunque de poco sirvió para el resultado final.

No pudo empezar peor el partido para el equipo de Ancelotti, que volvió a apostar por el 4-4-2 en rombo. Apenas 50 segundos después de escuchar el pitido inicial, Kean marcó a placer una jugada coral del combinado juventino en el interior del área merengue que Weah.

Intentó reaccionar el Madrid, que ganó metros y tuvo el empate con un disparo de Vini que se marchó desviado por muy poco. Pero la Juve aprovechó la fragilidad defensiva madridista para hacer el segundo. Esta vez Weah sí acertó en una rapidísima jugada de su equipo por la izquierda.

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Con el paso de los minutos, el conjunto blanco mejoró y arrinconó a su rival. Fue Joselu el que tuvo la más clara, pero perdonó. Una combinación entre Bellingham y Modric y un mal despeje italiano le dejó un balón franco para marcar, pero su disparo se fue fuera. Tuvo la oportunidad también el inglés con un disparo desde el balcón del área, pero Szczesny se lució.

El tanto madridista no llegaría hasta que Kroos conectó con Vini. Un mágico pase vertical de 50 metros liberó toda la maldad del brasileño con espacios. Se escapó en velocidad al marcaje de Bremer, se plantó en el área y definió con una elegante vaselina para poner el 1-2 en el marcador justo antes del descanso.

Estaban siendo los mejores minutos del Madrid, que pudo irse a los vestuarios por delante. Rüdiger, con un derechazo desde fuera del área, y Lucas Vázquez, cerraron la primera mitad con unos peligrosos remates desde fuera del área que no vieron portería.

Así arrancó también la segunda mitad. Joselu volvió a perdonar a la hora de partido, tras una gran jugada de Modric para abrirle espacios, y Valverde, saltado al campo segundos antes, rozó la igualada con un derechazo desde los 30 metros que se estrelló en el larguero.

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Hubo tiempo hasta para la polémica. Ya con los 90 minutos reglamentarios cumplidos, Enzo Barrenechea derribó a Rodrygo dentro del área, pero el árbitro pitó la falta fuera. Sin VAR, no se cambió la decisión y el Madrid perdió una oportunidad de oro. Con el equipo de Ancelotti volcado al ataque y sin acierto, la Juventus sentenció el duelo en el 95 con una jugada al contragolpe que Vlahovic puso en la red.

La derrota del conjunto blanco en su último test de pretemporada volvió a evidenciar la fragilidad blanca en defensa, adormilada en los goles de su rival, y que ha perdido el olfato goleador en pleno 'culebrón Mbappé', lejos de resolverse cuando el Madrid necesita más que nunca un 'killer'.