El Atlético de Madrid rentabilizó los errores defensivos del Rayo Vallecano para lograr una histórica goleada (0-7) en el derbi en Vallecas, que cerraba la tercera jornada de la Liga, y se colocó segundo en la tabla tras el Real Madrid gracias a los goles de Antoine Griezmann, Memphis Depay, Nahuel Molina, Álvaro Morata, con dos, Ángel Correa y Marcos Llorente.

El pulso en Vallecas duró apenas dos minutos, los que tardó Antoine Griezmann en enviar a la red una asistencia de De Paul y en alimentar las dudas de un Rayo que había vuelto a comenzar el curso de una forma apabullante, con dos triunfos a domicilio, pese al relevo de Francisco por Andoni Iraola.

La lesión de Vinícius es más grave de lo esperado: no volverá a jugar con el Real Madrid hasta finales de octubre

Esas incógnitas se añadieron con un despeje fallido de Aridane, que acabó en las botas del oportunismo de Depay para colocar el 0-2 apenas pasado el cuarto de hora y poco antes de que el exariete azulgrana se marchara envuelto en el lamento por una inoportuna lesión que le apartó del recital visitante.

Con un Rayo errático y desconocido, Nahuel Molina rompió la línea del fuera de juego para batir por bajo a un Dimitrievski impotente ante el ejercicio de eficacia de los del Cholo Simeone, que apenas tuvieron que apretar el acelerador para sentenciar (0-3) antes del descanso un duelo que se antojaba más peleado.

Tras el descanso y la entrada de Nteka, el Rayo mejoró en los minutos iniciales pero fue un espejismo. El Atlético, más vertical que nunca y aprovechando los espacios a la espalda de su rival, completó la goleada con dos contras culminadas por Morata, y otras dos por Correa y Marcos Llorente.

La victoria confirma el buen arranque atlético, que, con 7 puntos, tan solo está superado por el Real Madrid, con 9, mientras que el Rayo baja al octavo puesto con 6 antes de visitar al Betis el próximo sábado. Los rojiblancos recibirán el domingo en el Cívitas Metropolitano al Sevilla, colista.