La directiva del FC Barcelona vive uno de sus peores momentos tras conocerse este miércoles la imputación de su presidente, Joan Laporta, en el 'caso Negreira' por un delito de cohecho continuado por los presuntos pagos del club a Enríquez Negreira durante su primera etapa como mandatario de la entidad.
Laporta ha respondido este jueves a todas esas acusaciones en su primera entrevista tras conocerse la noticia, concedida a 'Catalunya Ràdio', en la que, para defenderse, ha atacado también al Real Madrid.
"Hay una campaña orquestada para desestabilizar al Barça. Campaña feroz y sin precedentes. Hay un madridismo sociológico que tiene mucha fuerza. Hemos competido con este madridismo sociológico. Tienen miedo que se pueda repetir aquel éxito. Es el mismo presidente del mejor Barça de la historia", ha afirmado el presidente culé sin tapujos.
Para Laporta, a quien le "interesa que el Barça vuelva a ser el mejor de la historia", es necesario "combatir al madridismo sociológico". Esta acusación, asegura, "no apunta concretamente a Florentino", pues considera que "allí (Madrid) hay un poder, rodeado de medios políticos. La mayoría de los que han tenido poder han sido del Madrid. Hay que aceptarlo con normalidad".
El presidente culé ha afirmado que "la relación con Florentino es correcta", por lo que le gustaría que, al contrario de lo que hizo José Castro, del Sevilla, el mandatario blanco estuviera en el palco del Camp Nou en el Clásico: "Me gustaría que viniera. El Barça-Madrid es el mejor espectáculo del mundo. Que los dos clubs estén representados por sus presidente está bien".
Sobre la imputación en sí, Laporta cree que no llegará a nada. "Ya veremos si llega a juicio. Estamos en la visita previa. Soy jurista y veo que no puede prosperar. Hay que trabajarlo para ganarlo. Nuestros servicios jurídicos lo están trabajando y bien. El 'caso Negreira' es un apartado más de este madridismo sociológico. Tratan de ensuciar", ha declarado.
Tras tratar varios temas ajenos al caso, Laporta ha vuelto a repetir su argumento para dejar las cosas claras: "Hemos recibido una herencia muy mala que nos tiene muy ocupados. Nos atacan por ser lo que somos. Esto de que el Barça sea más que un club no gusta. Tiene miedo que haya otra etapa esplendorosa".
El dirigente del FC Barcelona también se ha pronunciado sobre la situación política catalana. "Veo un país que lucha para rearmarse, sobrevivir, que lucha por su lengua, su cultura, que defiende su manera de entender la vida. Somos un país que lucha por su libertad, un país que deberá volver a la política para tener cada vez más fuerza. No quiero dar consejos a los políticos, es complicado", ha afirmado en un primer momento.
"Lo que sí deseo es la amnistía. Que todos los que participaron acaben de sufrir, empezando por el presidente Puigdemont. Me gustaría que se consiguiera la amnistía porque es una injusticia"
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