El Arsenal de Mikel Arteta conquistó anoche el Sánchez Pizjuán y descolgó al Sevilla del Grupo B, en el que ahora descansa tercero, empatado a dos puntos con el PSV y a tres de la segunda plaza que da el pase a octavos. Los 'Gabrieles' de los 'gunners', Martinelli y Jesus, fueron la pesadilla de los de Diego Alonso en una noche en la que los locales recortaron distancias por medio de Gudelj, esfuerzo fue insuficiente para lograr un valioso empate ante el coloso inglés.

Las dinámicas de los dos equipos este curso invitaban a un partido duro para los hispalenses. Y así quedó patente en los minutos iniciales, con dos acercamientos de Takehiro Tomiyasu sin puntería en su disparo.

Los dos sustos del japonés no pasaron a mayores y el conjunto andaluz respondió por parte de Ocampos, con un remate de exterior a centro de Jesús Navas, que se marchó desviado.

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Sin embargo, y aunque Marcos Acuña también se mostró profundo por la izquierda, las bandas del Sevilla no hallaban la referencia de Youssef En-Nesyri en la punta del ataque. El propio Ocampos y Lukébakio, sin pólvora, expresaban los puntos débiles frente a un Arsenal que empezó a avisar con seriedad.

Mediado el primer tiempo, Gabriel Jesus controló en línea de tres cuartos y asistió por abajo a Martinelli, que a la carrera se plantó delante de Orjan Nyland; no obstante, el guardameta noruego fue raudo en su salida y desbarató el uno contra uno.

El Sevilla carburaba en los minutos previos al descanso, pero entonces llegó el palo para los locales. En un contragolpe, Jesus domó la pelota en campo propio y se giró sobre sí mismo, regateando a dos adversarios para luego pasar al hueco. Martinelli corrió en solitario y sin miramientos, dejando atrás a Ramos, se vio en un duelo con Nyland; pero el noruego poco pudo intimidar, pues el '11' sorteó bien al meta y empujó a puerta vacía.

Eso aturdió al Sevilla, cuyo paso por vestuarios no halló remedio. Muestra de ello fue el tempranero segundo golpe en la reanudación, cuando Declan Rice forjó un ataque por el lado izquierdo y cedió el balón a Jesus, este se ubicó la pelota para ejecutar un derechazo al palo y ante el que Nyland se vio indefenso. Golazo del brasileño.

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El tanto no hundió a los locales y pocos minutos más tarde, en un saque de esquina botado por Ivan Rakitic, a la espalda de Ben White saltó imponente Nemanja Gudelj para cabecear el 1-2 que daba esperanza.

Arteta procuró frenar la reacción sevillista, pero la embestida final estuvo cerca de vivir un empate de épica. Mariano Díaz estrelló un tiro en el larguero, en una acción invalidada por mano. Y ya en el descuento apareció Raya para sostener el triunfo 'gunner'. Ahí murió el partido, con un Sevilla a trompicones y que cosechó una derrota dura y poco esperanzadora para sus aspiraciones en Champions.