Durante el previo al combate entre Miesha Tate y Julia Avila se ha hablado de manera recurrente sobre la posible retirada de Tate. Aunque la veterana excampeona de peso gallo afronta con naturalidad el tema, en esta ocasión ha querido zanjar cualquier posible discusión dando un golpe de autoridad y llevándose un claro triunfo en UFC Austin. La luchadora estadounidense venció por sumisión en el tercer asalto y se llevó uno de los bonus de la noche a mejor actuación.

Desde el primer momento, Tate salió al octágono con agresividad y buscando llevarse la pelea a la lona. Su estrategia funcionó y ‘Cupcake’ consiguió así dominar a Avila durante los dos primeros asaltos del combate hasta que ya en el tercer asalto, Tate volvió a derribar a su rival, para coger su espalda y cerrar un ‘face crank’ —un tipo de mataleón en el que la presión se ejerce sobre la cara y no sobre el cuello— que no dejó opciones a peleadora californiana.

En la entrevista posterior a la pelea, Tate confesó que las informaciones sobre su posible retiro le dieron energía sobre el octágono para vencer a Julia Avila. La peleadora estadounidense había encadenado dos derrotas consecutivas frente a Lauren Murphy y Ketlen Viera.

Turner deja KO a Green en UFC Austin donde el árbitro protagonizó un verdadero escándalo

Para el combate en UFC Austin, Tate ha regresado a su categoría de peso habitual, después de un intento fallido en el peso mosca. ‘Cupcake’ ha confesado las enormes dificultades para realizar el corte de peso en el momento actual de su vida y es por ello por lo que ha decidido volver al peso gallo.

INSTRAGRAM @mieshatate

Miesha Tate consiguió el cinturón en 2016 tras vencer por sumisión a Holly Holm, aunque apenas pudo retenerlo unos meses. En su primera defensa de título cayó derrotada ante la todopoderosa Amanda Nunes. La veterana luchadora, que tiene ya 37 años, es la actual número doce del ranking de la división. La excampeona ostenta un récord de 20 victorias y nueve derrotas, con cuatro triunfos por nocaut y ocho por sumisión.