Rodrygo aprovechó la ausencia de Vinicius por sanción y se convirtió en el mejor del partido del Real Madrid ante el Athletic Club de Bilbao. El brasileño fue el autor de dos golazos que le valieron la victoria al club blanco y que trajeron consigo dedicatoria incluida.
El delantero del Real Madrid abrió el marcador en el minuto 8, inventándose un gol que sorprendió a los espectadores. Tras celebrar el gol con sus compañeros, se dirigió al banquillo donde chocó la mano con Ancelotti y tras ello, se fundió en un emotivo abrazo con el fisio del club blanco, Jaime Salom.
Tras el encuentro, Rodrygo explicó el motivo de esta muestra de cariño ante los micrófonos de DAZN: "Porque falleció su madre, ayer o anteayer, y la verdad que estaba mal él y nosotros también por él. Era lo mínimo que podía hacer para poder celebrar mi gol con él. Era un momento muy especial para mí".
Este emotivo gesto tan solo es una prueba más del buen ambiente que se respira en el vestuario del Real Madrid, tanto por parte de sus jugadores como dentro del cuerpo técnico.
De hecho, se ha visto en numerosas ocasiones la unidad entre los futbolistas del conjunto blanco cuando alguno de sus jugadores como Vinicius o Bellingham han faltado por sanción o sanción y el resto de sus compañeros se han acordado de ellos sobre el terreno de juego. O en el partido de este domingo, en el que todos se alegraron por la vuelta de Militao.
Asimismo, Ancelotti habló en rueda de prensa sobre la gran actuación del brasileño en el partido: "Ha jugado muy bien, ha marcado la diferencia. Hoy nos ha dado la oportunidad de cambiar el marcador muy pronto. Es un jugador de gran nivel con una calidad muy alta. Ahora se dirá que se encuentra mejor en la izquierda, pero para mí Rodrygo es bueno en todos los sitios. Hay que recordar que marcó dos goles en la derecha en una semifinal de Champions. Como es normal en un delantero, a veces no acierta y otros marca como hoy".
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