El próximo 29 de junio (la madrugada del 30 en España) se producirá uno de los eventos más esperados en el mundo de las artes marciales mixtas (MMA): el regreso de Conor McGregor al octágono de la UFC. El irlandés se verá las caras con el luchador estadounidense Michael Chandler en la pelea estelar de UFC 303 en el T-Mobile Arena de Las Vegas.

A pesar de la cercanía del evento, y de que en circunstancias similares cualquier otro luchador estaría en pleno campamento de entrenamiento para el combate, McGregor ha sido pillado de fiesta con su prometida Dee Devlin en un bar de Dublin (The Black Forge Inn). La estrella de las MMA fue grabada el pasado viernes bailando y besándose con Devlin. Al parecer, el luchador asistía a una sesión secreta del DJ Mark ‘MK Kinchen y el grupo irlandés Belters Only. 

Lo que no queda claro si 'The Notorious' —que ha insistido varias veces en que ha dejado el alcohol hasta la noche del combate—estaba consumiendo o no. En una publicación en redes que más tarde eliminó, McGregor dejaba ver su ostentoso Rolex marcando las dos y cuarto de la madrugada. 

No es la primera vez que el deportista es sorprendido de fiesta. Mientras tanto su rival permanece concentrado en Florida completando su preparación para la pelea y con un perfil mucho más discreto en redes.

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Muchos han dudado de la preparación que Conor McGregor está haciendo para la pelea contra Chandler, o incluso de si la pelea llegará a producirse del todo. Por el momento, tal y como anunció el presidente de UFC, Dana White, está prevista una conferencia de prensa el 3 de junio en Dublín, donde los luchadores se reencontrarán por primera vez tras la grabación de The Ultimate Fighter en 2023. En este evento harán el primer cara a cara del esperado duelo que pondrá el broche final a la Semana Internacional de la Lucha a finales de junio.