Gervonta Davis continúa imparable en los cuadriláteros. Después de noquear a Ryan García hace poco más de un año, ahora ha sido el turno para Frank Martin. El aspirante estadounidense llegaba con un impresionante récord de 18-0, pero poco pudo hacer ante Davis, que sigue engordando su legado (y su récord, que se pone 30-0).

No pareció en ningún momento que Martin pudiera poner en apuros a Davis. Empezó fuerte, pero a partir del cuarto asalto el actual campeón obligó a su rival a trabajar de forma casi constante hacia atrás. Davis, por tanto, le fue comiendo terreno hasta hacerle daño, por primera vez, en el séptimo asalto. En el octavo asalto, cuando Martin besó la lona ya no pudo continuar.

Davis, por tanto, retuvo su cinturón de los pesos ligeros de la AMB e ingresó unos 10 millones de dólares. Se pone de manifiesto, una vez más, la diferencia de ingresos que existe entre los boxeadores de primer nivel y los luchadores de UFC. Y es que rara vez alguno de los peleadores más potentes de Dana White consigue superar el millón de dólares por combate. No es de extrañar, por tanto, que muchos coqueteen con cambiar el octágono por el cuadrilátero.

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Con esta victoria Davis, que viene del equipo de sparring de Floyd Mayweather, se consolida como uno de los mejores boxeadores del momento. En cuanto a su futuro, hay tres nombres que flotan en el horizonte: Vasyl Lomachenko (FIB), Shakur Stevenson (CMB) y Denys Berinchyk (OMB).