Se han convertido, por méritos propios, en la pareja más codiciada de toda la Eurocopa y por la que ya suspiran todos los grandes clubes del viejo continente. Lamine Yamal y Nico Williams volvieron a erigirse protagonistas en el partido de octavos ante Georgia, que comenzó mal pero terminó por todo lo grande.
Tanto uno como otro fueron dos de los grandes responsables de la remontada de la selección española y ambos supieron asumir la responsabilidad, pese a su juventud, cuando las cosas venían mal dadas.
Lamine no marcó, aunque rozó el gol en varias ocasiones, pero fue el perfecto asistente de Fabián en el tanto que suponía el 2-1 para España y que completaba la remontada. Su pase fue antológico.
Nico no quiso ser menos y poco después, en una soberbia jugada individual marca de la casa, llevó la tranquilidad al equipo marcando el golazo del 3-1. Entre los primeros jugadores que llegaron para felicitarlo estuvo Lamine Yamal, su amigo, con el que se marcó un baile que hizo las delicias de la afición.
La relación entre ambos jugadores es mucho más que profesional y se han convertido en inseparables durante toda la concentración, contagiando su buen rollo a los compañeros. Es más, no es el primer baile con el que deleitan a los aficionados, pues en las redes sociales también han demostrado su capacidad.
Con el pitido final, además, los dos dejaron otra imagen que da buena cuenta de su amistad... y de lo jóvenes que son todavía: aún sobre el césped del RheinEnergieStadion, jugaron a 'piedra, papel o tijera' para ver quién bebía agua primero.
Veremos si tras el periodo en la Eurocopa, ambos llegan incluso a compartir equipo, porque el propio Yamal ya ha declarado en alguna ocasión que le encantaría que Nico Williams fichara por el Barcelona y sabido es el interés azulgrana en el delantero del Athletic. Lo malo es que el papel del jugador en el torneo continental le va a revalorizar sobremanera y muchos grandes ya andan al acecho, lo que podría dificultar su llegada al Camp Nou.
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