Como cada año, la agencia libre de la NBA, el periodo en el que los jugadores que acaban contrato con sus equipos pueden anunciar su nuevo destino, ha dejado movimientos sorprendentes, y que pueden afectar sobremanera el devenir de la liga de baloncesto estadounidense.
El movimiento con un mayor impacto en la liga es probablemente la marcha de Paul George a los Philadelphia 76ers, equipo que le pagará un contrato máximo de 212 millones de dólares repartidos durante las próximas cuatro temporadas. El alero, que había jugado las últimas cinco temporadas con los Clippers, se une a Joel Embiid y Tyrese Maxey para buscar su primer anillo de la NBA.
Otro movimiento que ha revolucionado la liga estadounidense es el de Klay Thompson a los Dallas Mavericks. El fiel escudero de Stephen Curry en los Warriors se une a Luka Doncic y Kyrie Irving, quienes cayeron en las finales de la liga ante los Boston Celtics en cinco partidos. Klay recibirá 50 millones de dólares repartidos entre los próximos tres años.
El periodista especializado Adrian Wojnarowski ha revelado otros nuevos contratos, como el fichaje de Chris Paul por los Spurs de Victor Wembanyama, la incorporación de Isaiah Hartenstein a los Oklahoma City Thunder, o la unión entre Jonas Valanciunas y los Washington Wizards.
Por su parte, el también periodista Shams Charania, ha repasado algunas grandes renovaciones que podrían completarse en las próximas horas. Jayson Tatum, la superestrella de los Celtics, podría firmar el contrato más grande de la historia de la NBA, percibiendo un total de 314 millones de dólares en cinco temporadas por renovar con Boston.
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