Conor McGregor y Khabib Nurmagomedov se enfrentaron el 6 de octubre de 2018. En aquella ocasión, el daguestaní venció por sumisión en el cuarto asalto. Aunque han pasado muchos años y 'The Eagle' ni siquiera es ya un luchador profesional, su rivalidad ha continuado y llega hasta el día de hoy.
A raíz de un atentado con más de veinte fallecidos ocurrido en Daguestán —tierra natal de Khabib—, McGregor aprovechó para arremeter contra su antiguo rival. Le llamó "rata mentirosa" y le acusó de terrorista después de que se vinculara al autor del ataque, Gadzhimurad Kagirov, con el gimnasio del peleador ruso, Eagle FC. El manager de Khabib, Ali Abdelaziz, no dudó en responder a "The Notorious" a través de X: "Estoy deseando verte y escupirte en la cara".
Por su parte, Nurmagomedov ha condenado el ataque terrorista. "Ir a una iglesia y matar a alguien solo porque practican una religión diferente. ¿Realmente necesito condenar esto? ¿No está claro que es un acto brutal e inhumano? ¿Dónde es esto algo normal? En Daguestán, más de treinta nacionalidades, y por supuesto, la mayoría practica el Islam, pero hay también judíos y cristianos. Esto nunca pasó en mis 35 años viviendo en Daguestán", explicaba el antiguo campeón de UFC.
Además, Khabib se ha defendido de las acusaciones alegando que el autor del atentado en ningún caso formaba parte de su equipo. "Estuvo en un campamento en el gimnasio en algún momento, quizás un par de meses, pero nunca fue parte del equipo", aclaró el deportista ruso.
Rusia embarga a Khabib
Al margen de su icónica rivalidad, el campeón de MMA se enfrenta a problemas reales en su país. Y es que el gobierno ruso ha congelado sus cuentas bancarias por problemas fiscales. Según medios de comunicación daguestaníes, The Eagle tendría una deuda con el Servicio Federal de Impuestos rusos que asciende a más de tres millones de dólares.
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