Fútbol

El Atlético pone fin a la tiranía del Real Madrid y del Barça en la Liga

Diego Costa celebra un gol, mientras manda callar al público rival.
EFE

A la décima temporada fue la vencida y un equipo que no es el Real Madrid ni el Barcelona se ha proclamado campeón de Liga. El Atlético ha puesto fin a la tiranía de los dos clubes que habían sido los últimos nueve campeones. Desde la temporada 2004-2005, seis campeonatos culés y tres merengues.

El último en levantar el título fue el mejor Valencia de la historia, el de Rafa Benítez, Cañizares, Ayala, Vicente, Baraja, Mista..., en la campaña 2003-2004, la misma en la que consiguió la UEFA.

Las estadísticas son tan apabullantes que no es que solo hayan sido campeones Barça o Madrid, sino que en estos años han sido siempre primero o segundo, excepto en la 2007-2008, en la que ganaron los merengues y el Villarreal se metió entre medias de ambos.

Un proyecto de dos años y medio

El 23 de diciembre de 2011, el Cholo Simeone sustituyó a Gregorio Manzano en las riendas del Atlético. La cuesta abajo era palpable, a diez puntos de la Champions y en décimo lugar en la Liga. Cinco meses después, ganó la Liga Europa al Athletic y se quedó a dos puntos de clasificarse para la máxima competición continental, en quinta posición.

Luego vinieron la Supercopa de Europa de 2012 frente al Chelsea, y la Copa del Rey 2013 ante su máximo rival, el Real Madrid, y en casa de su máximo rival, poniendo fin a 14 años sin victorias ante su vecino. Además, estableció récords como la racha de 16 victorias consecutivas en Europa (superó las 11 de Ajax y Barcelona) y la marca de 23 partidos seguidos oficiales sin conocer la derrota, acabando la Liga en tercer lugar.

El Atlético no ganaba la Liga desde la temporada 1995-96, en la que hizo doblete con la Copa. Simeone buscaba resultados con un trabajo a largo plazo y los están consiguiendo. Su contrato hasta 2017 asegura, en principio, la continuidad del proyecto.

¿Otras alternativas?

Una Liga de dos es aburrida, incluso, para algunos aficionados del Madrid y del Barça. Una Liga de tres es deseable y más emocionante. Y una Liga de cuatro es casi imposible, sobre todo porque el poderío económico determina y muchos equipos que han realizado grandes campañas (por ejemplo, Real Sociedad o Villarreal) se ven obligados a vender a sus mejores jugadores o son incapaces de mantener el nivel en tres competiciones.

Solo Athletic, Sevilla y Valencia podrían hacer frente a Real Madrid y Barça, pero les tiene que pasar como al Atlético: protagonizar una campaña espectacular, que se junten un grupo de grandes jugadores emergentes con fe inquebrantable en el objetivo y un punto de suerte. Y eso no ocurre todos los años. De los tres citados al principio, solo los bilbaínos han demostrado esta temporada que pueden competir... pero de lejos.

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