Barcelona: Losert, Juanín (5), Tomás (1), Puig (3) Fernández (3), Vori (3), Perunicic (1), Romero (6), Nagy (6), Hernández (3), Larholm (2), y Ugalde (-).

Ademar: Saric (Alilovic, ps), Jakobsen (-), Perales (6), Aguinagalde (3), Martins (4), Stranovsky (2), Garralda (4), Entrerrios (6), Castresana (1), Krivochlykov (-), Urdiales (1), Sigurdsson (-).

Árbitro: Breto León (Cataluña) y Huelín Trillo (Cataluña).

El Barcelona se adjudicó su duodécima Copa del Rey al imponerse con claridad al Caja España Ademar de León por 33-27, en un partido que sólo se mantuvo igualado en los primeros veinte minutos, ya que en ese momento el equipo catalán puso la directa hacia el título.

La voluntad y el esfuerzo de los leoneses no fueron suficientes argumentos para frenar a un Barcelona que ha encontrado en la trigésimo- segunda edición de la Copa del Rey el mejor nivel de la temporada.

El Barcelona repitió buena parte del guión de la semifinal ante el CAI, en la que rompió el partido en la recta final de la primera parte y ya pudo manejar el partido a su antojo en la reanudación. El golpe anímico por el parcial de 7-0 sufrido en los diez últimos minutos de este periodo fue imposible de superar para el Ademar, que en la segunda parte buscó una misión imposible.

«Siempre que se llega a una final y no puedes ganar te queda un cierto grado de insatisfacción, aunque ellos han dominado con claridad el juego y han sido mejores», reconoció con sinceridad el técnico del Ademar, Manolo Cadenas.